La tormenta tropical Josephine se acercaba lentamente el sábado hacia las islas del Caribe, mientras que el fenómeno Kyle se alejaba del centro de la costa de Estados Unidos en el Atlántico.
El Centro Nacional de Huracanes informó que ambas tormentas representaban mínimas amenazas a tierra. El ojo de Kyle se encontraba a 580 kilómetros (360 millas) al sureste de Providence, Rhode Island, mientras que el vórtice de Josephine estaba a 320 kilómetros (200 millas) al este-noreste del norte de las islas de Sotavento.
Josephine tenía vientos máximos sostenidos de 75 km/h (45 mph), dijeron los meteorólogos, y se desplazaba al oeste-noroeste a 26 km/h (16 mph), mientras que Kyle se movía al este-noreste a 33 km/h (21 mph), alejándose de la costa este norteamericana. con vientos máximos sostenidos de 85 km/h (50 mph).
Las autoridades no han emitido ningún aviso de amenaza a raíz de las tormentas.
Se anticipa que Josephine provocará precipitaciones de unos 3 a 8 centímetros (de unas 1 a 3 pulgadas) en partes de las Islas Sotavento, las Islas Vírgenes y Puerto Rico.
La temporada de tormentas ha sido sumamente activa este año y los expertos esperan más tormentas con nombre en las semanas próximas.
En lo va de año numerosas, tormentas han sentado récords al ocurrir más temprano que sus predecesoras para esa letra del alfabeto: Cristóbal, Danielle, Edouard, Fay, Gonzalo, Hanna, Isaías, Josephine y Kyle.
Hasta ahora sólo Hanna e Isaías se han convertido en huracanes.
Antes de Kyle, la primera tormenta nombrada con “K” fue Katrina, que se formó el 24 de agosto de 2005, según el investigador de huracanes de la Universidad Estatal de Colorado, Phil Klotzbach.
Isaías mató a dos personas en el Caribe hace días. Hubo otros decesos cuando la tormenta tocó tierra en Carolina del Norte y se trasladó por la costa este, desatando inundaciones, tornados, incendios y apagones.
El mes pasado, el huracán Hanna golpeó a la costa de Texas con vientos y lluvias fuertes que causaron inundaciones y apagones.