La Cámara de Diputados modificó el acomodo de curules y colocó acrílicos separadores para que los legisladores puedan mantener la distancia para las sesiones de mañana, 31 de agosto, y del martes, 1 de septiembre, cuando se abran los trabajos del Congreso de la Unión.
El lunes, durante la sesión preparatoria, sólo participarán los diputados que asistirán a elegir a los integrantes de su Mesa Directiva. En cambio, el el martes habrá un representación tanto de diputados como senadores para iniciar el tercer año de trabajo legislativo.
Para ambas sesiones, se tomarán las medidas sanitarias de desinfección, habrá filtros en los que se tomará la temperatura y todos los asistentes deberán someterse a una prueba PCR para evitar que quienes tengan coronavirus participen en los trabajos.
El 1 de septiembre, asistirán a la Cámara de Diputados los senadores, salvo aquellos que tengan algún impedimento físico o por su edad representen un factor de riesgo.
Con esta sesión dará inicio el tercer año de ejercicio de la LXIV Legislatura y la Mesa Directiva de San Lázaro informó que “en todo momento se privilegiará la salud y la vida del personal que ingrese al recinto; sólo asistirá el mínimo indispensable para el desarrollo de las tareas legislativas”.
Tampoco asistirán al Palacio Legislativo los empleados que tengan algún tipo de riesgo como enfermedades o sean mayores de 60 años, así como los responsables del cuidado de menores de cinco años. La Mesa Directiva ordenó que el desarrollo de las tareas legislativas se lleve a cabo con el personal mínimo indispensable.
Para el ingreso a las instalaciones de la Cámara de Diputados será obligatorio el uso de cubrebocas, además en los filtros sanitarios quienes no lo porten recibirán uno.
kl