Ricardo Cortés Alcalá, director general de Promoción de la Salud, declaró que hasta el momento no se sabe cuál será la eficacia final de ninguna de las vacunas contra el COVID-19.
En conferencia de prensa explicó que cuando una vacuna sale al mercado, en una población que no está controlada como en los ensayos clínicos, regularmente la efectividad de ésta disminuye.
Al respecto, dijo que la Organización Mundial de la Salud (OMS) también ha sido cuidadosa en torno a sus declaraciones sobre los resultados preliminares de algunos de los proyectos en fase tres.
Cortés Alcalá señaló que existen dos escenarios principalmente: “una vacuna tan extraordinaria como la del sarampión, que existe en el mundo y que corta cadenas de transmisión y que inclusive es la estrategia para eliminar la enfermedad; o una vacuna contra la influenza, que no previene en sí la infección”.
La vacuna contra la influenza no garantiza no infectarse, pero sí reduce en más de 80 por ciento las complicaciones y el ingreso a una unidad de cuidados intensivos.
“Si los resultados son como los de una vacuna contra la influenza va a ser extraordinario también porque lo que queremos es que la gente no se muera”, declaró.