Durante el confinamiento por la crisis sanitaria de COVID-19 aumentó el uso de dispositivos como vapeadores y cigarros electrónicos, cuyo daño pulmonar es equivalente al de los cigarros convencionales, advirtió Juan Wolfgang Zinser Sierra, médico oncólogo del Instituto Nacional de Cancerología.
En conferencia de prensa, manifestó que hay una transición en el uso del tabaco que forma parte del proceso evolutivo de la industria.
En cuanto a los sistemas electrónicos como vapeadores y pipas señaló que pueden tener el triple de cantidad de nicotina, lo que aumenta el riesgo de adicción. Además, sus componentes pueden ocasionar cáncer entre otros problemas pulmonares.
El especialista explicó que los pulmones de una persona fumadora de 50 años pueden tener la condición de una persona sana de 70 años.
Por su parte el subsecretario de Prevención y Promoción de la Salud, Hugo López-Gatell, recordó que estos productos “han sido falsamente introducidos en el mundo como una alternativa para dejar de fumar. No existe evidencia científica alguna que demuestre que son una alternativa para dejar de fumar”.
En tanto, Jorge Julio González Olvera, director general de la Comisión Nacional contra las Adicciones (Conadic), recordó que el tabaquismo es una condición de riesgo para las personas que padecen COVID-19.
La población fumadora de tabaco tiene 14 veces más de probabilidades de presentar neumonía por el coronavirus, que es una de las condiciones graves de la enfermedad.