A partir de este mes de diciembre se espera un impacto significativo en la movilidad y desplazamiento forzado de migrantes de Centroamérica, principalmente, hacia nuestro país, que ya comienza a notarse por el aumento en las solicitudes de refugio y protección.
Alejandro Encinas Rodríguez, subsecretario de Derechos Humanos, Población y Migración de la Secretaría de Gobernación (Segob), advirtió lo anterior tras asegurar que México ya se prepara para hacer frente a esa situación, incluso ya hay pláticas con naciones como Guatemala, Honduras y El Salvador.
“Estaremos, sin lugar a dudas, registrando crecimientos muy significativos en los próximos meses, a partir de este mes de diciembre, debido a las condiciones sociales agravadas en Centroamérica, por los desastres naturales”, subrayó el funcionario.
Al participar en la III Reunión Anual del Marco Integral Regional para la Protección y Soluciones (MIRPS) “Prioridades y desafíos regionales sobre el desplazamiento forzado en Centroamérica y México”, de manera virtual, admitió que durante los meses de la pandemia por Covid-19, hubo una reducción de 46 por ciento en las solicitudes de refugio.
“Hasta el mes de noviembre se habían registrado 36 mil 400 solicitudes, es decir, 46 por ciento menos que en el mismo periodo del año anterior. Pero a partir de diciembre se ha registrado un crecimiento significativo similar al de los años anteriores.
“Al momento hay en el país 70 mil solicitudes de refugio, de las cuales se han otorgado el reconocimiento en 37 mil 867 casos que sumados a los seis mil 791 que se han vinculado a la protección complementaria, representan más de 44 mil 600 personas que tienen la condición de refugio o protección complementaria en el país”, dijo.
Destacó que se han promovido leyes como la que prohíbe la detención de niños, niñas y adolescentes para garantizar sus derechos, la Ley de Desplazamiento Forzado Interno que está en espera de ser aprobada por el Senado, y la de salud que permitirá acceso a estos servicios, en Chiapas y Tabasco.
Encinas refirió que también se han optimizado los sistemas de trámites y registros, que era uno de los principales obstáculos para obtener la condición de refugiados o la protección complementaria.
Ante representantes de países centroamericanos, de la ONU y la COMAR, el subsecretario anticipó que esta región enfrentará nuevos retos en materia de movilidad de las personas migrantes, por lo que se requiere una solución integral.
