La iniciativa para reformar la Ley del Banco de México (Banxico), con el objetivo de obligar al banco central a comprar las divisas extranjeras que no puedan repatriarse, y que dichos recursos pasen a formar parte de las reservas internacionales del país, será discutida este martes en la Cámara de Diputados.
Así lo acordó la Junta de Coordinación Política (Jucopo), tras una reunión privada que sostuvo la tarde de ayer. Se prevé que dicha iniciativa sea avalada en sus términos por los diputados de Morena y sus aliados, pese a las advertencias del sector bancario, que avizora riesgos importantes para la autonomía de Banxico.
El pasado viernes, el gobernador del banco central, Alejandro Díaz de León, fue de los primeros en pronunciarse en contra: “Banxico absorbería los riesgos de todas las instituciones con las que opere, haciéndolos propios, es decir, se concentrarían los riesgos del Banco de México, lo que pondría en riesgo la disponibilidad de la reserva internacional, aun cuando no se incluyan a esta reserva estos billetes y monedas”.
Incluso este lunes, la Comisión de Hacienda de San Lázaro sostuvo una reunión con los integrantes de la junta directiva de la Asociación de Bancos de México (ABM), quienes también alertaron sobre el riesgo de paralizar el sistema de pagos.
“Dicha reforma no maneja ningún control antilavado, representaría someter a Banxico a proceso de auditoría y sujeto a sanciones, que llevaría a que parara el sistema de pagos de México”, señaló el director gerente del Bank of America Merrill Lynch México, Emilio Romano.
El presidente de la ABM, Luis Niño de Rivera, señaló que en los últimos años, la banca mexicana ha exportado aproximadamente 45 mil millones de dólares en efectivo a la Reserva Federal de los Estados Unidos y otros países, “lo que es posible porque cumplimos cabalmente con las regulaciones nacionales e internacionales en materia de prevención de lavado de dinero y financiamiento al terrorismo, para ello, hemos invertido cantidades muy relevantes de dinero y de tiempo en tecnología de alto nivel”.
En la reunión también se manifestaron en contra los directivos en México de BBVA, Eduardo Osuna; de Santander, Héctor Grisi; de Banorte, Marcos Ramírez; de Citibanamex, Manuel Romo; de Scotiabank, Adrián Otero, y de BanCoppel, Julio Carranza; así como Raúl Martínez Ostos, director de Barclays.
Pese a ello, el diputado de Morena Benjamín Saúl Huerta insistió en que la reforma no violenta ni vulnera la autonomía del Banxico. “Debemos dar oportunidad a los migrantes mexicanos y trabajadores del turismo de vender sus divisas a costos adecuados, porque las casas de cambio se han enriquecido al comprarlas a 10 pesos cada una. Es una situación de orden social, donde se debe poner voluntad política para que el banco central adquiera esas divisas con la regulación existente”, señaló.
En contra también se pronunció la Asociación de Gobernadores de Acción Nacional, quienes solicitaron a los diputados escuchar las voces de los expertos.
Será a las 10:00 horas de hoy cuando la Comisión de Hacienda y Crédito Público sesione para votar la reforma a la Ley del Banco de México. Se prevé que quede aprobado con el voto mayoritario de Morena y sus aliados y posteriormente suba al pleno.