Con manos experimentadas, con las que se defendió a puñetazos cuando “era más joven” en la céntrica colonia de Ventura Puente, en Morelia, barrio bravo michoacano, el diputado de Morena, Hirepan Maya, utilizó su tiempo en la tribuna de San Lázaro para forjar un “churro”.
“Yo me lo estoy preparando aquí para demostrar que es un discurso moral, porque no los conocen, van aquí afuera y se los consiguen… antes nos decían pin… marihuanos, sólo por cómo vestíamos, o por traer el cabello largo”, subrayó.
Tres horas y 40 minutos después, el diputado Maya contribuyó a los 316 votos para aprobar en lo general el dictamen que permite a las personas mayores de 18 años consumir marihuana de manera legal, además de que se podrán poseer y trasladar hasta 28 gramos.
El documento indica que el consumo deberá realizarse sin afectar a terceros, especialmente menores de edad: “queda prohibido el consumo de cannabis en lugares denominados como ‘100 por ciento libres de humo de tabaco’, así como en las escuelas, públicas y privadas, de cualquier nivel educativo”.
Le hacen cirugía mayor
Los diputados hicieron modificaciones a 53 de los 64 artículos avalados por el Senado, entre ellos:
Para el cultivo de plantas, de seis a un máximo de ocho, se impone la obligación de solicitar una licencia y renovarla anualmente, y en caso de impedir la revisión, habrá una sanción de hasta 27 mil pesos, además de que se cancelará el permiso.
El dictamen establece que quienes consuman dentro de una vivienda o casa habitación “deberán tomar las medidas necesarias que impidan que el humo” sea inhalado por no consumidores.
Se permite también constituir asociaciones, sin fines de lucro, para cultivar y poseer plantas de cannabis psicoactivo para consumo de los asociados con fines lúdicos.
“Las asociaciones deberán constituirse con un mínimo de dos y un máximo de 20 personas mayores de edad”, quienes deberán limitarse a cultivar hasta cuatro plantas por socio, “sin exceder en ningún caso de 50”. De igual forma, autoriza la venta del cannabis psicoactivo y sus derivados para uso lúdico, cuyos interesados deberán tramitar una licencia y sólo podrán vender dentro del territorio nacional, en establecimientos autorizados.
El dictamen contempla ssanciones con prisión de diez meses a tres años y hasta ochenta días multa por posesión, cuando la cantidad de que se trate sea superior a 5.6 kilos e inferior a 14, “cuando por las circunstancias del hecho tal posesión no pueda considerarse destinada a comercializarlos o suministrarlos, aun gratuitamente”.
Cuando la cantidad que se posea sea la misma, pero se compruebe que es con fines de comercialización ilegal, las penas serán de tres a siete años de prisión años y de ochenta a trescientos días multa.
Tras su aprobación en lo general, se avalaron 4 de 306 reservas en lo particular, para cambiar el concepto de “consumo abusivo” por “consumo problemático”; establecer que los “productos y derivados” del cannabis también están prohibidos para menores de edad, y sanciones de 80 hasta 300 días de multa a quienes comercialicen la marihuana de manera ilegal.
La iniciativa será devuelta al Senado al haber sido modificados 53 de los 64 artículos, cuyo principal cambio es la derogación de diversos apartados por los que se creaba el Instituto Mexicano de la Cannabis; en su lugar, se estableció que el Consejo Nacional contra las Adicciones (Conadic) será el encargado de emitir licencias para cultivar, comercializar y vender marihuana.
Ahora es responsabilidad de la Cámara alta, antes del 30 de abril, avalar la Ley Federal para la Regulación del Cannabis, plazo que otorgó la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN) para despenalizar la marihuana.
Cuando el dictamen entre en vigor, nuestro país se convertirá en el tercero de América en legalizar la marihuana, junto con Canadá y Uruguay.
La minuta fue avaladapor 316 votos a favor de Morena, PRD y MC, 129 en contra, del PRI, PAN y PES, además de 23 abstenciones.
Durante la discusión, la priista Cynthia López sacó una bolsa con 28 “churros”, de orégano, aclaró, para mostrar el número de cigarrillos de marihuana que podrán comprar los jóvenes: “si los hacen de medio gramo, podrán consumir 56 churros en cada tienda, como los cigarros y el alcohol. Mañana, cuando sus hijos estén consumiendo, dirán: ‘pero si tú la legalizaste cuando eras diputado’”.
En respuesta, el morenista Hirepan Maya subió a la tribuna para “forjar su churro”, y a pesar de que lo hizo en menos de dos minutos, dijo que “los traen (los churros) para discutir sobre si sus hijos van a estar más expuestos o no a un toque”.
Más tarde, aclaró que él no es consumidor, “sólo lo hice porque el debate se desvió, y ni lo prendí, porque es un espacio libre de humo”, aseguró, aunque después, varios de sus compañeros pidieron que diera muestras de su técnica. Su compañera de bancada, Simey Olvera, remató el debate: “no sean mochos, no se limiten, fúmense un cigarrito, porque la mota legal eleva la moral”.