La directora de la Comisión Nacional del Agua (CONAGUA), Blanca Jiménez Cisneros, es ingeniera ambiental cuenta con maestría en control de la contaminación; cuenta con un doctorado y posdoctorado en tratamiento de agua residual y reúso.
Jiménez Cisneros fue Directora de la División del Agua y Secretaría del Programa Hidrológico Internacional de Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura (UNESCO); responsable del proyecto para el Desarrollo de Cambio Climático de México; líder del proyecto de saneamiento y seguridad alimentaria en la Universidad de Pretoria en Sudáfrica, entre otros.
Su trabajo ha sido reconocido a nivel mundial con 16 diferentes distinciones y premiado en 21 ocasiones con distinciones como el Premio Nobel de la Paz 2007 como integrante del Panel Intergubernamental del Cambio Climático; fue una de las cinco personas designadas por el Programa Internacional Hidrológico de la UNESCO para promover el uso de la ciencia y la tecnología para el desarrollo de políticas a nivel internacional, regional y local, para ayudar a los tomadores de decisiones a resolver retos en la materia.
Además, Blanca Jiménez Cisneros fue la única persona de América Latina electa para encabezar el Grupo de Especialistas en Reúso del Agua de la International Water Association y también formó parte de los expertos de la Fundación Bill And Melinda Gates, que definieron sus necesidades científicas y tecnológicas en materia de saneamiento.
En 2009 recibió el Premio Nacional de Ciencias y Artes y un año antes le fue entregada la Medalla Heberto Castillo por parte del gobierno de la Ciudad de México; la Real Orden de la Estrella Polar otorgada por Carl XVI Gustaf, Rey de Suecia y el Premio de Ecología y Medio Ambiente, de la Fundación Miguel Alemán Valdés, entre otros.
Blanca Jiménez, quien fue propuesta para ocupar la Embajada de México en Francia, cuenta con logros como establecer normas y criterios socialmente aceptables y económicamente realistas para el tratamiento y reúso del agua residual en la agricultura. Para la Ciudad de México y la OMS, desarrolló criterios para evaluar la calidad del agua que se reúse para consumo humano mediante la recarga artificial de acuíferos.
ntb