La vacuna Patria que presentó el Consejo Nacional de Ciencia y Tecnología (Conacyt) fue desarrollada con base en un proyecto de la Escuela Icahn de Medicina de Monte Sinai de Estados Unidos.
Pese a que la directora del organismo, María Elena Álvarez-Buylla aseguró que era un biológico elaborado en México, es un modelo que originalmente fue presentado por científicos en Estados Unidos.
La empresa mexicana Avimex firmó una licencia de uso exclusivo para emplear la tecnología desarrollada por la Escuela de Monte Sinai para la elaboración de una vacuna contra COVID-19 en el país.
La investigación liderada por Peter Palese, Florian Krammer y Adolfo García-Sastre fue publicada en la revista científica The Lancet en noviembre pasado.
Conoce más sobre la vacuna patria
De acuerdo con la Escuela de Medicina de Monte Sinai el virus puede incubarse en huevos de gallina, el mismo mecanismo utilizado para producir la vacuna de la influenza en los años 50.
La ventaja es que los países pueden producir el biológico a bajo costo con este esquema.
Los investigadores estudiaron el uso del virus de la enfermedad Newcastle, un padecimiento de aves de corral, como un vector o vehículo para inducir una respuesta inmunológica contra el SARS-COV-2.
El estudio fue financiado por el Instituto Nacional de Alergias y Enfermedades Infecciosas (NIAID) y subvenciones de los Institutos Nacionales de Salud (NIH) de EU.
Actualmente este modelo se está utilizando para producir una vacuna en Estados Unidos, Tailandia y Brasil.