La iglesia católica demandó que la actualización de los libros de texto de la Secretaría de Educación Pública (SEP) se realice sin prisa ni urgencia porque no son buenas consejeras y sólo despierta sospechas de pretender la imposición de una ideología o adoctrinamiento del Estado a los niños mexicanos.
En el editorial del semanario Desde la Fe, la Arquidiócesis Primada advirtió que sería lamentable volver a caer en la imposición de una corriente de pensamiento o posición política desde las instituciones educativas, ya que en el pasado se intentó y fue rechazado por la sociedad, en especial los padres de familia.
"Ni la prisa ni la urgencia son buenas consejeras cuando se trata de revisar libros de texto. Tanto la prisa como la urgencia nos llevan a procesos sin metodología ni orden, y despiertan sospechas sobre una posible manipulación ideológica, que traería de regreso un adoctrinamiento de parte del Estado hacia los niños", indicó.
Iglesia católica: los libros deben tener valores
La representación católica consideró que los libros de texto deben ser fruto de una plataforma con valores para los niños, con el fin de forjar un mejor futuro, en el que los padres de familia tienen derecho de decidir, junto con las autoridades educativas, sobre la formación de ellos.
Hoy más que nunca es necesaria una reconstrucción del tejido social integral, articulada, generosa y consensuada con toda la comunidad educativa nacional; sólo de esta manera es posible garantizar la libertad de conciencia, de educación y religiosa, y construir un auténtico y desideologizado Estado laico...subrayó.
La jerarquía católica coincidió con el presidente de la Conferencia del Episcopado Mexicano (CEM), Rogelio Cabrera, en que la tarea de revisar los libros de texto requiere "cocinarse lentamente" porque es crucial para el desarrollo educativo del país.
Por ello, mencionó que es fundamental realizar procesos objetivos, apegados a criterios y participios pedagógicos, blindados y libres de cualquier ideología encaminados a la verdad y al aprendizaje. Los contenidos, abundó, deben ser verificables, con fundamentos validados por la ciencia.
Otro factor indispensable respecto a los libros de texto, expuso, es buscar el consenso de los maestros, de los especialistas y de los padres de familia, sobre todo en temas delicados, pero siempre subordinados a la verdad de la realidad, de la ciencia y de los valores universales.
La Arquidiócesis Primada de México enfatizó que en este 2021 que se conmemoran los 500 años de la fundación de la Nueva España y 200 del surgimiento del Estado mexicano, se puede aprovechar para promover la inclusión y enseñanza de la historia real de nuestro país, más allá de confrontaciones.
"En los libros de texto se puede también hablar de los hombres y mujeres que, con valentía y convicción, apostaron por la construcción de una realidad social que en su momento trajo muchos frutos a esta tierra. Hombres como Juan de Zumárraga o Vasco de Quiroga, que promovieron los derechos humanos, mucho antes de que existiese una Declaración Universal", puntualizó.