Con la supuesta compra simulada de un predio municipal, la panista Angélica Moya presuntamente desvió recursos del erario por 9.8 millones de pesos en 2006, cuando se desempeñaba como alcaldesa de Naucalpan, en el Estado de México.
El predio en cuestión es el que actualmente ocupa el estacionamiento del mercado de san Bartolo, con una superficie de 9 mil metros cuadrados.
Sin embargo, el terreno era propiedad del municipio desde 1968, cuando el Ayuntamiento lo compró a un particular, identificado como Eduardo Soberanes Romero. La venta abarcó un lote de 13 mil metros cuadrados, conocido como predio La Victoria. Ahí, se construyó el mercado y una base para los trabajadores de la dirección de Servicios Públicos.
Moya Marín, quien hoy aspira a reelegirse bajo las siglas del PAN-PRI-PRD, fue demandada ante la entonces Procuraduría de Justicia del Estado de México. La investigación se abrió por el delito de peculado, bajo la carpeta TLA/MR/I/325/06.
Bajo el argumento de que un particular reclamaba la propiedad del predio La Victoria, la alcaldía solicitó a los 600 locatarios del mercado una aportación individual de 15 mil pesos, a fin de llegar a un acuerdo. Pero la negativa de los comerciantes fue un pretexto para que Moya Marín hiciera uso de las arcas municipales.
En sesión de Cabildo se discutió el tema y se demostró con documentos que el Ayuntamiento de Naucalpan era el propietario legal, sin embargo, la compraventa promovida por la presidenta municipal se llevó a cabo.
El priista Gustavo Parra, quien se desempeñaba como regidor, se negó a votar a favor de la compra, porque constituía un delito flagrante.