El regreso a clases presenciales podría ser el “gatillo” que desate un nuevo repunte de contagios de Covid-19, porque no hay un plan estratégico real para evitar la propagación del virus, además de que no se considera el importante rezago educativo de los menores y las condiciones de contención psicológica que muchos de ellos requieren por problemas desatados durante el confinamiento, señaló Laurie Ann Ximénez-Fyvie, doctora en Ciencias Médicas por la Universidad de Harvard.
La profesora e investigadora de Microbiología de la UNAM explicó que el plan del Gobierno, además de ser “improvisado”, está “desactualizado”, pues atiende a la información de la pandemia que data del año pasado, cuando se pensaba que el coronavirus se transmitía principalmente por la vía de contacto. Hoy, dijo, se sabe que la transmisión ocurre por el aire y por vías respiratorias.
“El Gobierno ahorita se la ha pasado hablando del lavado de manos, de usar gel antibacterial, del tapete sanitizante, el aerosol desinfectante (…) pero todas esas acciones no sirven para nada, porque consideran una vía de transmisión que hoy sabemos es inexistente; son positivas, desde luego, y lavarse las manos es una buena acción en todos los sentidos, pero para Covid-19 esas ya no son todas las medidas que se requieren”, explicó, en entrevista con La Razón.
Jaime Bustos Martínez, especialista en Microbiología y académico de la Universidad Autónoma Metropolitana, coincidió en que es demasiado pronto para volver a las aulas, en razón de que la vacunación aún no tiene un ritmo satisfactorio, además de que los planes de inmunización no incluyen a los niños y adolescentes, caso que, expuso, no es exclusivo de México, pues ocurre en todo el mundo, porque las pruebas para las vacunas sólo se hicieron en adultos.
“Si se apuran a vacunar y le ganamos la competencia al virus, el virus ya no va a tener dónde replicarse y por lo tanto la probabilidad de infecciones va a disminuir mucho; pero si nosotros no nos apuramos a vacunar a todos en el planeta, el virus seguirá produciendo infecciones. Estamos obligando al virus a irse a otras comunidades, que en este caso son los niños y, a pesar de que se diga que los niños no resultan infectados, esto sí ocurre y también hay casos graves”, dijo.