Un estudio retrospectivo realizado en un hospital pediátrico de la Ciudad de México reveló que 23 por ciento de los menores hospitalizados por COVID-19 requirieron cuidados intensivos, además se registraron cuatro fallecimientos.
El estudio "Características clínicas y epidemiológicas de los pacientes pediátricos diagnosticados con COVID-19 en un hospital terciario de la Ciudad de México" fue publicado en julio de este año por la Universidad de Oxford.
El análisis de los casos se realizó del 1 de abril al 28 de septiembre de 2020 en un nosocomio especializado en la atención de pacientes pediátricos. La muestra abarcó a 86 menores de 18 años que requirieron hospitalización por la enfermedad.
Un total de 20 menores requirieron cuidados intensivos por la enfermedad. De ellos, un 40 por ciento (ocho) no tenían enfermedades previas o factores de riesgo a la salud.
En tanto, siete menores eran pacientes con enfermedades hemato oncológicas y dos tenían obesidad.
El tiempo promedio en el que los menores permanecieron en el área de cuidados intensivos fue de 12.5 días, de acuerdo con el estudio. Además, durante este periodo 17 por ciento requirieron un ventilador para poder respirar.
Por otra parte, reveló que en 42 casos se identificó un contacto previo con alguien que dio positivo a COVID-19. La principal fuente de infección fueron los padres y madres de los menores con 39 por ciento.
El mayor número de pacientes se concentró en los mayores de 12 años (34), seguido de los niños desde los dos meses a los cinco años (28); niños de cinco a 12 años (21) y en menores de dos meses se detectaron tres casos.
En cuanto a los síntomas, un 81 por ciento presentó fiebre, 51 por ciento tos y 35 por ciento dolor de cabeza por COVID-19. También un 25.6 por ciento presentó dolor abdominal, 19 por ciento vómito y siete por ciento diarrea.
Sobre los síntomas neurológicos, el estudio reveló que 24 por ciento de los menores reportaron irritabilidad y siete por ciento convulsiones.
FGR