La Comisión Permanente del Congreso rechazó la realización de un periodo extraordinario para revisar el desafuero de los diputados Benjamín Saúl Huerta y Mauricio Toledo, así como la prórroga correspondiente al outsourcing.
Durante la sesión presencial que se realizó este martes, los legisladores negaron el extraordinario con 20 votos a favor, 12 votos en contra y 3 abstenciones, por lo que no se alcanzó la mayoría calificada.
Los integrantes de la Comisión Permanente ni siquiera avalaron, en votación económica, que se devolviera el dictamen a la Primera Comisión y se determinó que, por mayoría calificada, se desechara la propuesta para convocar a un periodo extraordinario.
Cuando ya se había pasado a otro punto de la sesión, los integrantes de la Permanente se arrepintieron del desechamiento y acusaron que éste se hubiera avalado con error de la secretaria de la Mesa Directiva, la senadora Marcela Mora, y hasta del presidente, el senador Eduardo Ramírez Aguilar.
Al respecto, la senadora Claudia Ruiz Massieu, del PRI, puntualizó que el reglamento establece que no se puede repetir la votación, al igual que el senador Damián Zepeda, del PAN, quien dijo que si hubo un error sólo era cuestión de concretar.
Tras un breve debate, se repitió la votación y con 12 a favor, 11 en contra se corrigió que se regresara el dictamen a la Primera Comisión de la Permanente.
La propuesta para el extraordinario incluyó temas de última hora: outsourcing, revocación de mandato y la ratificación de los nombramientos pendientes: el del secretario de la Función Pública, de Hacienda y el integrante del Banco de México.
Durante el debate, los grupos parlamentarios del PAN, PRI, PRD, PT y Movimiento Ciudadano manifestaron su rechazo a la realización del periodo extraordinario con todos los temas que incluyeron, porque puntualizaron que ni siquiera había dictámenes.
Acusan “pacto de impunidad”
El panista Damián Zepeda aseveró que nunca se había visto tanta simulación y tanta maroma para que el tema central, que era el del desafuero de Benjamín Saúl Huerta y Mauricio Toledo, fuera frenado.
Es tan evidente que hay un pacto de impunidad que se inventan una y otra y otra maroma para tratar de forzar a que la oposición diga que no al periodo extraordinarioDamián Zepeda, senador del PAN
En el mismo sentido se expresó la priista Claudia Ruiz Massieu, quien señaló que el grupo mayoritario refrendó sus prácticas menos honrosas y más frecuentes, porque emprendieron un proceso legislativo marcado por el desaseo, al sumar propuestas de último minuto.
Quieren utilizar al Congreso para solventar problemas internos entre grupos y corrientes de Morena, como si la representación mayoritaria fuera suficiente para cancelar la deliberación de los asuntos al interior de ellosClaudia Ruiz Massieu, senadora de la República
La petista Alejandra del Carmen León manifestó su rechazo a que se realizara un periodo extraordinario con base en dictámenes que dijo, no sólo violan el debido proceso, sino que se caracterizan por la venganza política, en referencia al caso de Mauricio Toledo.
Afirmó que el dictamen presenta graves vicios de origen que vulnera los derechos humanos y constituye un acto de linchamiento.
La senadora del PAN, Kenia López Rabadán, subrayó que se pretendían filtrar al periodo extraordinario temas que no habían sido dictaminados.
Sin embargo, el senador Eduardo Ramírez Aguilar precisó que tras haber recibido la propuesta, como presidente de la Comisión Permanente, decidió incorporar los asuntos que llegaron a dicho órgano de gobierno y señaló que en caso de que no compartieran su criterio, podían actuar jurídicamente.
Al final, el periodo extraordinario no se aprobó por la Comisión Permanente.
LRL
