En su tercer intento en 22 días, la Primera Comisión de la Permanente aprobó con 13 votos el dictamen para convocar a un segundo periodo extraordinario de sesiones a fin de llevar a cabo el proceso de desafuero de los diputados Benjamín Saúl Huerta, de Morena, y Mauricio Toledo, del PT, así como el procedimiento relacionado con el fiscal de Morelos, Uriel Carmona Gándara.
Sin embargo, uno de los temas que mantiene el encono en las negociaciones entre legisladores de la 4T y de la oposición ha sido el haber presentado los tres casos en un sólo dictamen a la Comisión Permanente, ya que por distintas causas, varias de las bancadas han propuesto que se presentaran por separado, sin lograrlo para poder votarlo de manera individual en la sesión de la Comisión Permanente del próximo 9 de agosto.
El caso del diputado Huerta, acusado de violación y abuso sexual es el único en el que hay consenso entre todos los grupos parlamentarios para desaforarlo, por lo que en caso de que la Permanente apruebe llevar a cabo el periodo extra el miércoles 11, será despojado del fuero 20 días antes de que concluya la legislatura.
En cuanto al asunto de Toledo, se suma una fisura interna: morenistas en el Senado están a favor de quitarle el fuero; sin embargo, legisladores guindas en San Lázaro han cobijado al petista para mantener su alianza parlamentaria que permita sumar sus 39 votos a partir de septiembre, cuando comience la siguiente legislatura, de acuerdo a diputados de Morena consultados por La Razón.
Además, integrantes del equipo de asesores de Toledo confiaron a este diario, consideran que en caso de que se concrete su desafuero, él puede regresar a tomar protesta el próximo 29 de agosto ya que se reeligió para la LXV Legislatura, esta vez como candidato de la coalición conformada por Morena-PVEM y PT, éste último, partido que lo postuló.
El equipo del legislador del PT explicó que el artículo 14 de la Ley Orgánica del Congreso General de los Estados Unidos Mexicanos, otorga a Toledo el derecho de acudir el 29 de agosto para tomar protesta como diputado que logró su reelección, por lo que en caso de ser desaforado el próximo 11 de agosto, podrá recuperar nuevamente el fuero 18 días después, de acuerdo a su percepción.
Sin embargo, en entrevista con este diario el abogado constitucionalista Raúl Pérez Johnston expuso que en caso de que la Cámara de Diputados le retire el fuero, Toledo no podrá recuperarlo tras el inicio de la siguiente Legislatura.
“Si se le retira el fuero no lo recupera sino hasta que tenga sentencia absolutoria y se pueda reintegrar. Con la declaración de procedencia, se le separa del cargo mientras dure el procedimiento penal. En mi interpretación, el cambio de Legislatura no influye, porque se le retira temporalmente el fuero al funcionario mientras lo sea, para que enfrente a la justicia penal”, explicó.
Lo anterior, precisó Pérez Johnston, con fundamento en el artículo 111 de la Constitución que indica que la protección va aparejada a la vigencia del cargo.
“En el caso del diputado Toledo, como fue sujeto de reelección, permanecerá otros tres años en su calidad de diputado, hasta el 2024, por lo que mientras tenga ese cargo, para proceder penalmente en su contra, es necesaria una declaración de procedencia de parte de la mayoría de los miembros presentes del Pleno de la Cámara de Diputados”, precisó el constitucionalista.
Mientras que senadores como Manuel Añorve, del PRI, y Noé Castañón, de Movimiento Ciudadano votaron en contra del dictamen porque incluye a Uriel Carmona Gándara, fiscal de Morelos, señalado por omisiones y delitos que se prevén en el Código Penal Federal, y en la Ley General del Sistema Nacional de Seguridad Pública, cuenta con un amparo, por lo que se en la reunión se subrayó que el Congreso de la Unión puede incurrir en un desacato si es desaforado.
“Con este dictamen se incurre en una violación a una suspensión concedida es el que se separaran los temas, para que pudiéramos, en dado caso, votar a favor por el desafuero referente al diputado Saúl Huerta”, apuntó Castañón.