Durante la VI Cumbre de la Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeños (Celac) las diferencias entre distintas naciones salieron a flote, entre las que destaca la crítica del presidente de Uruguay, Luis Lacalle Pou, en contra de Cuba, Nicaragua y Venezuela, a quienes acusó de no respetar la democracia plena.
Durante su participación, el mandatario indicó que la democracia es uno de los ejes rectores de la Celac, pues es el mejor sistema “que tienen los individuos para ser libres”; sin embargo, mencionó que esta no existe “cuando no se respeta la separación de poderes, cuando desde el poder se usa el aparato represor para callar las protestas, cuando se encarcelan a opositores, cuando no se respetan a los derechos humanos”.
En respuesta, Nicolás Maduro, presidente de Venezuela, cuyo gobierno tampoco fue reconocido por el presidente de Paraguay, Mario Abdo Benítez, retó a los mandatarios de Uruguay y Paraguay para hablar de democracia.
Durante la Cumbre, Maduro aseguró que le ganó la pasión tras levantar la voz al retar al paraguayo, por lo que en tono más mesurado propuso al Presidente de México, Andrés Manuel López Obrador decidir el lugar y fecha para hablar de democracia, libertades, revolución, neoliberalismo y otros temas, en transmisión pública o privada.
Y yo le digo al presidente de Paraguay, ponga usted la fecha, el lugar y la hora para un debate sobre democracia, en Paraguay, Venezuela o América Latina y estamos listos para darlo, ponga a usted el lugarreiteró.
Por su parte, casi al finalizar el evento, Miguel Díaz-Canel, solicitó una réplica para señalar que el presidente Lacalle desconoce la realidad de Cuba.
Al tiempo mencionó que el pueblo de Uruguay recolectó cerca de 700 mil firmas para echar atrás el “paquetazo neoliberal” aprobado en dicho país.
La mención a Cuba que hizo el presidente Lacalle denota su desconocimiento de la realidad. El coraje y la libertad del pueblo cubano se ha demostrado durante seis décadas frente a la opresión y bloqueo de Estados Unidos, obstáculo fundamental para ser mal a nuestro desarrollo, lo cual el presidente Lacalle no mencionódijo Díaz-Canel
“Escuche usted a su pueblo que recogió más de 700 mil firmas contra la ley urgente que usted impuso y que cambió las condiciones para ajustar el precio de combustibles, disminuir el rol de las empresas públicas, modificar el proceso penal, paquetazo neoliberal”, dijo.
Además, aseveró que la Organización de Estados Americanos está al servicio de Estados Unidos y ha apoyado los intentos de aislamiento de Cuba, así como las intervenciones militares en América Latina y el Caribe a través de los golpes de estado y dictaduras militares, incluso en Uruguay.
“La OEA guardó silencio mientras se torturaba en nuestra región y en su país es lo que calla. Hoy se asesina y desaparece en Latinoamérica, no es en Cuba donde ocurren estos hechos. Es la OEA la que tiene un impresentable secretario general que contribuyó, participó en el golpe de estado al gobierno de Bolivia en el 2019. Es el neoliberalismo mismo y es la OEA lo que acaba de defender, presidente Lacalle”, expuso el mandatario cubano.
En respuesta, Luis Lacalle mencionó que, en su país, “por suerte”, la oposición puede manifestarse, una gran diferencia con el “régimen cubano”.
El presidente de Cuba utiliza argumentos de mi nación que obviamente no comparto y no son ciertos. Sí hay algo de cierto, que, en mi país, por suerte, la oposición puede juntar firmas. En mi país, por suerte, la oposición tiene resortes democráticos para quejarse, esa es la gran diferencia con el régimen cubanodijo el presidente uruguayo.
Además, Lacalle finalizó su intervención con un fragmento de una canción utilizada en las protestas en Cuba: “quiero citar una canción muy linda de quienes se sienten oprimidos por el gobierno”, mencionó.
“Qué nos siga corriendo la sangre por querer pensar diferente, ¿quién les dijo que Cuba es de ustedes, si Cuba es de toda mi gente”, continuó.
En contraparte, Miguel Díaz-Canel exhortó a Lacalle a fijar un lugar y fecha para discutir de frente los asuntos entre ambas naciones.
Por su parte, el ministro de Relaciones Exteriores de Nicaragua, Denis Moncada Colindres, condenó y rechazó “los intentos perversos de destruir a los pueblo y revoluciones de Cuba, Bolivia, Venezuela y Nicaragua” y señaló que las practicas injerencistas deben terminar.
Por ello manifestó su posición de no respaldo y no voto a favor de Argentina para la presidencia pro tempore de la Celac, debido a que, de acuerdo con el ministro, lo ha informado con “gran ruido mediático, trabaja con Estados Unidos para resolver la situación de Nicaragua”.
“El gobierno de Argentina se convirtió en instrumento del imperialismo, subordinado a sus intereses hegemónicos, diseñando una estrategia para vulnerar la soberanía de Nicaragua. Se atrevido a interferir en nuestros asuntos, haciendo política propia, interviniendo en clara e insultante sintonía con ‘los yankees’ en temas internos de nuestra patria. El gobierno Argentina se ha prestado a violar la soberanía nacional”, expresó el nicaragüense.
En respuesta, el subsecretario de Asuntos de América Latina de Argentina, Juan Carlos Valle Raleigh, aseguró que las acusaciones del gobierno de Nicaragua son falsas, y lamentó que el tema se haya traído a la reunión de la Celac.
“Los gobiernos se expresan por sus hechos, no por especulaciones o por trascendidos que se dan a conocer en la prensa. Argentina no se hace cargo de esas cosas. Los hechos se expresan normalmente en comunicados oficiales en decisiones que se toman”, dijo.
El funcionario rechazó todos los términos de la intervención del canciller de Nicaragua, así como de las dos notas que estuvo circulando en días previos porque son falsas, “las acusaciones son falsas y lo lamentamos, ya que no se debió traerlo a esta sala”, mencionó.
Además, dijo que con las acusaciones se le da juego a la OEA, aunque aclaró que uno de los pilares de la política exterior es la no injerencia, “siempre sostenemos que cada país debe encontrar su propio camino y la ayuda del exterior es dar ayuda solo si es requerida”, externó.
Finalmente aseguró que Argentina no ha acompañado ninguna de las iniciativas 2020-2021 en la que la OEA busca sacar a Nicaragua.
avc