No nos borrarán, dicen padres de normalistas

Acusan 7 años sin justicia para los 43

Marchan padres de los normalistas de Ayotzinapa desaparecidos; "son ya siete años de este peregrinar cuesta arriba... no nos borrarán", dice uno de ellos; el reclamo sigue siendo el mismo "¡porque vivos se los llevaron, vivos los queremos!"

Familias de los 43 normalistas, acompañadas por estudiantes de escuelas normales, marcharon por calles de la capital del país, ayer. Foto: Cuartoscuro

A siete años de la desaparición de los 43 normalistas de la Escuela Isidro Burgos en Ayotzinapa, padres y madres de los estudiantes marcharon este domingo en la Ciudad de México para exigir justicia.

Previo al inicio de la marcha se llevó a cabo una misa a los pies del Ángel de la Independencia. Después, los familiares y colectivos iniciaron la caminata sobre Paseo de la Reforma.

“Queridas madres y padres, hijos ausentes. Son ya siete años de este peregrinar cuesta arriba”, expresó el padre al inicio de la misa, en donde se improvisó un altar con unas mesas y manteles blancos.

“No nos borrarán” “Nos faltan 43 y nuestras hijas también” fueron algunas de las consignas que pintaron sobre la valla metálica que protege al Ángel de la Independencia.

El reclamo de las madres y padres continúa siendo el mismo desde hace siete años: “¡Porque vivos se los llevaron, vivos los queremos!”, gritaron mientras se manifestaban.

En siete años, las autoridades han identificado a tres de los 43 normalistas de Ayotzinapa: Alexander Mora, cuyos restos fueron encontrados en el basurero de Cocula en 2014; mientras que los fragmentos de hueso hallados en la barranca de la Carnicería permitieron detectar a Christian Rodríguez y Jhosivani Guerrero en 2020 y 2021 respectivamente.

Al frente del contingente se ubicaron las madres y padres oriundos de Guerrero portaban en su pecho los letreros con el rostro de los 43 estudiantes: Jorge Álvarez, César González, Martín Sánchez, y la lista de nombres continúa.

Otros caminan con paliacates al cuello, sosteniendo machetes con la leyenda “43 Ayotzinapa” o “Ayotzinapa Vive” grabado a lo largo de la hoja.

A la par, un joven iba cargando sobre su cabeza un ataúd negro de cartón, sujetándolo con ambas manos. En éste se lee la palabra “justicia” con letras rojas que parecen imitar la sangre derramada de los normalistas.

Al llegar al antimonumento de los 43 normalistas de Ayotzinapa, los padres se detuvieron un momento y con el puño en alto recordaron a sus hijos desaparecidos. Después, realizaron el pase de lista de cada uno de los estudiantes.

Los padres continuaron su marcha hasta llegar al Zócalo capitalino, en el que realizaron un mitin.

“Vamos a continuar en esta lucha y vamos a continuar en la exigencia y la presentación con vida de los 43 compañeros”, exigieron a las autoridades.

Algunos familiares como Minerva Bello, Bernando Campos, Tomás Ramírez y Saúl Bruno Rosario ya murieron, sin encontrar una explicación a la desaparición de sus hijos la noche y madrugada del 26 y 27 de septiembre de 2014 en Iguala.

En honor a aquellos padres que no conocieron la resolución del caso, los asistentes guardaron un minuto de silencio.

Los familiares reclamaron los pocos avances en la investigación durante este sexenio, al igual que lo hicieron tras la última reunión con el Presidente Andrés Manuel López Obrador.

Además, señalaron que el Gobierno federal no ha podido extraditar a Tomás Zerón, quien ha sido señalado por tortura en la investigación del caso, pero se encuentra en Israel.

Como parte del operativo, la Secretaría de Seguridad Ciudadana desplegó mil policías en el Centro Histórico y sus alrededores. Además, se colocaron vallas metálicas en Paseo de la Reforma.