A pesar del incremento de contagios por la variante Ómicron del COVID-19 en el país, el próximo lunes 31 de enero arranca el ciclo escolar 2022-2 de forma presencial para alumnos del Instituto Politécnico Nacional (IPN), mientras que la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM) lo hará en formato híbrido.
El IPN informó a principios del año que sus más de 221 mil estudiantes regresarán a las aulas de forma escalonada, con la seguridad de que el Programa Escalonado Humano de Regreso a Clases (PEHRC) y el Plan Integral de Regreso a las Actividades (PIRA) garantizan el sano retorno tanto de la planta docente como de trabajadores y del alumnado.
Las 90 unidades del IPN, ubicadas en 24 estados del país, retomarán sus actividades académicas, y sus 16 mil docentes, además de los 9 mil trabajadores de apoyo, también volverán a las instalaciones.
En un comunicado, el Instituto aclaró que respeta las posiciones y diferencias que el regreso a clases pueda motivar entre la comunidad, pero hizo un llamado para retornar a los planteles, en los que, aseguran, implementarán las medidas sanitarias y protocolos para prevenir y manejar posibles contagios.
Por su parte, la UNAM informó que las entidades académicas donde ya se realicen actividades presenciales continuarán con un aforo definido, bajo criterios de seguridad que no permitan aglomeraciones.
En ese sentido, consideran esencial procurar el uso adecuado del cubrebocas y la ventilación en espacios cerrados, además de seguir los lineamientos sanitarios establecidos.
En sintonía con el formato híbrido, la máxima casa de estudios indicó en un comunicado que los consejos técnicos o internos de cada facultad podrán determinar continuar con clases a distancia.
El secretario general de la UNAM, Leonardo Lomelí Vanegas, aseguró que es mejor esperar a que disminuya el número de contagios por COVID-19, por lo que prevé que en dos a cuatro semanas la mayor parte del alumnado y personal pueda volver a las instalaciones.
CEHR