A Yaen y a Gianna les diagnosticaron un tumor en el cerebro en el 2021 y, después de esperar dos semanas en el Hospital General Siglo XXI de la Ciudad de México, por fin encontraron una cama para poder tener sus quimioterapias.
Oriundos de Cuautitlán Izcalli, en el Estado de México, los menores acudieron diariamente en las últimas dos semanas al nosocomio junto a su padre, pero no alcanzaban un sitio.
El viernes pasado les dieron la noticia de que por fin habría espacio para poder aplicarles el tratamiento, lo que puso feliz al padre y a los menores.
Luisa María Alcalde respalda al gobierno de Ricardo Gallardo
“El problema del sufrimiento, en muchas ocasiones, no lo entienden las autoridades, ya que los hacen ir a los hospitales a esperar, sin una solución a sus tratamientos; es inhumano que los tengan esperando por una cama. Ellos la tienen muy dura porque los dos menores tienen un tumor cada uno en el cerebro, pero son valientes, no se quejan y tienen muchas ganas de vivir, pero sus papás son los que la tienen también dura por los gastos y la atención especializada que deben tener”, explicó Jesús Godínez, director de Por un Hogar, lugar que da cobijo a madres y niños con cáncer que llegan a la Ciudad de México y que los acompaña en su proceso.
El experto explicó que el panorama en el país es sumamente duro, ya que en su albergue fallecieron tres menores en el 2021 por no tener atención, medicamentos y diversos insumos.
“Tengo 14 años viviendo con niños con cáncer y veo que tenemos mucho que aprender de ellos, porque son unos verdaderos guerreros, ya que pasan muchos tratamientos y quimioterapias y no se rajan. Sus mamás son unas guerreras y hacen una mancuerna para salir delante de los obstáculos”, destacó.
De acuerdo con datos del Centro Nacional para la Salud de la Infancia y la Adolescencia de la Secretaría de Salud (SSa), en México hay entre cinco mil y seis mil casos de cáncer en menores de 18 años, además de que las principales enfermedades son leucemia, linfomas y tumores en el sistema nervioso central.
El promedio anual de muertes por cáncer infantil es de dos mil 150 en la última década, de acuerdo con la dependencia federal, aparte de que el cáncer es la principal causa de muerte por enfermedad en mexicanos entre cinco y 14 años de edad.
A Dana, de siete años, le fue diagnosticado cáncer en el 2018, pero ante la falta de insumos y medicamentos, sus padres se tuvieron que amparar para que la pequeña pudiera contar con la atención ante el desabasto que hay de insumos.
Le diagnosticaron cáncer en 2018 y todo empezó muy bien; además, en el Hospital Infantil la atendieron de maravilla, pero los problemas comenzaron en el 2019, cuando los medicamentos comenzaron a escasearJesús Godínez
Claudia Huerta, madre de la menor, explicó que fue gracias a un amparo que pudieron tener acceso a los medicamentos y tratamientos, y aseguró que es una situación muy difícil tener a un menor con un padecimiento y el viacrucis que tienen que pasar las familias para casi rogar que los atiendan.
“Los menores necesitan de cuidados extremos, ya que su alimentación debe ser especializada; los cuidados y la higiene son mayores”, añadió.
El panorama de los niños con cáncer en México es muy duro, de acuerdo con los padres, porque hay muchos de escasos recursos que no pueden costear los insumos y eso los pone en desventaja, además de que los medicamentos deben estar disponibles sin amparos, porque es un derecho a la salud, afirmaron.
avc
