El programa Jóvenes Construyendo el Futuro debe aclarar un monto de 28 millones de pesos por apoyos duplicados, depósitos a beneficiarios fallecidos y pagos al Seguro Social por personas que no estaban incluidas en el padrón, así lo reveló la Auditoría Superior de la Federación (ASF).
En su tercera entrega de la federalización de la Cuenta Pública 2020, indicó que el programa que depende de la Secretaría de Trabajo y Previsión Social (STPS), requiere implementar mecanismos de control de beneficiarios, a fin de evitar estas inconsistencias.
La auditoría encontró prácticas que contravienen las reglas de operación del programa. Un ejemplo es la duplicación de apoyos perteneciendo a otro programa.
En el documento detalla que mil 315 beneficiarios de Jóvenes Construyendo el Futuro recibieron simultáneamente un apoyo por el programa Jóvenes Escribiendo el Futuro, lo que generó un posible daño por 19 millones 604 mil pesos.
Además, 41 beneficiarios recibieron soportes mientras trabajaban en dependencias, lo que generó irregularidades por 153 mil pesos. En tanto, 71 participantes laboraban en el sector privado, lo que provocó un posible daño por un millón 41 mil pesos.
El órgano fiscalizador detectó que el programa pagó tres millones 188 mil pesos a 17 mil 283 personas, en un lapso de tres a 12 meses, sin estar en el padrón de beneficiarios, ni demostrar que se capacitaron en alguno de los centros autorizados.
Durante ese año, también se depositaron apoyos a 38 beneficiarios que fallecieron en ese periodo, lo que provocó un daño al erario por 351 mil 720 pesos.
Por ello, la ASF recomendó a la STPS que implemente mecanismos de control y supervisión para que se validen las inscripciones de los beneficiarios ante el Registro Nacional de Población e Identidad, antes de la instrucción del pago, con el fin de evitar que correspondan a personas fallecidas.
MAEP