“Sentados, preparen sus cosas por favor, sentaditos”, fue la orden que se escuchó en el sonido ambiente del Salón de la Tesorería de Palacio Nacional, para evitar que los reporteros, fotógrafos y camarógrafos desalojaran el lugar mientras sonaba la alerta sísmica la mañana de ayer.
Fue en punto de las 8:40 horas cuando un reportero interrumpió la pregunta que hacía al primer mandatario cuando sonó la alarma sísmica y sólo alcanzó a decir en el micrófono: “la alerta, Presidente…”.
Enseguida, el Presidente Andrés Manuel López Obrador dijo: “vamos”, y caminó hacia la puerta de salida, seguido por el secretario técnico del gabinete, Carlos Torres Rosas, y después lo siguieron varias personas de su equipo.
Apenas escucharon la alarma, los reporteros tomaron sus cosas rápidamente para desalojar el lugar; sin embargo, se escuchó la voz de un hombre al micrófono que les decía: “sentados, preparen sus cosas por favor, sentaditos por favor, ‘horita’ vamos a evacuar. Permanezcan sentados, por favor, sentados”, mientras los reporteros tomaban fotos, videos y algunos otros se sentaban en las sillas del salón.
Fue entonces que la alarma dejó de sonar, pero la voz seguía diciendo: “sentados, sentados”, y aunque el movimiento no era perceptible, fue hasta después de dos minutos cuando las instrucciones cambiaron: “A continuación, vamos a evacuar el inmueble; nos vamos a ir a la parte de atrás y vamos a agarrar a la izquierda; nos vamos a ir hacia la Fuente de Pegaso, por favor”.
Fue entonces que los reporteros pudieron desalojar el salón, una vez que ya todo había concluido.
Y mientras caminaban hacia la puerta de salida, se escuchaban más indicaciones: “A los costados, por favor, a los costados; ya nadie pasa, ya nadie, ya nadie entra”, mientras los periodistas registraban el momento con sus celulares y cámaras de video.
Sin embargo, el salón no quedó vacío en su totalidad, pues permanecieron en éste algunas personas, técnicos de audio y video, así como personal de seguridad. La transmisión de la conferencia matutina, continuaba vía streaming, mientras los minutos corrían.
Transcurrieron 12 minutos y regresó al salón el Presidente con su equipo, así como los reporteros. Ya una vez enterado de la situación, el primer mandatario dio pormenores del sismo y señaló que no hubo afectaciones reportadas hasta ese momento, pero, de ser necesario, estarían brindando la ayuda que se solicitara. Y fue así que dio por terminada la conferencia.
Esta situación incomodó a los representantes de los medios de comunicación, quienes hablaron con Marco Antonio Mosqueda, jefe de Protección Civil de la Presidencia de México, para que aclarara por qué se decidió que los periodistas no podían desalojar el salón. El funcionario sólo desestimó los cuestionamientos de la prensa sobre la demora de más de dos minutos y se limitó a responder: “Es que ustedes son prensa, y andan detrás de la noticia”.
“Nosotros manejamos un protocolo de 60 o 40 segundos, dependiendo… es un minuto de la alerta sísmica, otro minuto para que esté temblando y deje de temblar y ya evacuamos. Nosotros los tenemos sentaditos, tranquilos, no estamos expuestos a nada aquí, ¿o vieron algo?”, señaló Mosqueda.