México se posicionó como el quinto país en el mundo donde circulan más armas relacionadas con hechos violentos, pues se contabilizaron 13 millones sin registro, de acuerdo con el informe del consultor jurídico de la Secretaría de Relaciones Exteriores (SRE), Alejandro Celorio.
“El Small Arm Survey calcula que hay más de 13 millones de armas sin registro en circulación en nuestro país, a pesar de que las leyes mexicanas sobre posesión de armas son estrictas”, comunicó Alejandro Celorio.
Durante su participación virtual en la sesión del Consejo Permanente de la Organización de los Estados Americanos (OEA), Celorio detalló que en México sólo existe una oficina, administrada por la Secretaría de Defensa Nacional (Sedena), para que los civiles puedan solicitar permiso y comprar armas de fuego.
En el marco del Día Interamericano para Contrarrestar la Fabricación y el Tráfico Ilícitos de Armas de Fuego, el consultor jurídico agregó que la disponibilidad de armas se relaciona directamente con la violencia y actividades criminales.
De acuerdo con fuentes oficiales, entre 70 y 90 por ciento de las armas encontradas en escenas del crimen en México, se rastrea su origen en los Estados Unidos de AméricaAlejandro Celorio
Asimismo, aseveró que el problema no sólo se enfoca en la cantidad de estos artefactos, sino en las características de éstos y que son traficados ilícitamente.
“Un buen número de estas armas son de alto poder y de diseño para uso militar. Esto otorga a los grupos criminales un poder de fuego significativo, el cual propicia que las fuerzas del orden se involucren en una espiral de violencia que incrementa la letalidad de los enfrentamientos y costos de los operativos”, mencionó.
Explicó que ese mismo ciclo de violencia se mantiene entre los grupos criminales que se enfrentan y mantienen en una búsqueda permanente por aumentar su poder de fuego. Las consecuencias son ataques y masacres que dejan varias decenas de muertos en minutos.
Esta situación de violencia armada tiene efectos en todas las esferas de la vida de los mexicanos. La magnitud de las muertes con armas de fuego es tal que a partir de 2005 afectó la esperanza de vida de los mexicanosAlejandro Celorio
La situación también afecta el funcionamiento de las agencias encargadas de proteger a la población, pues incrementa el costo y la dificultad de cumplir con su misión, al mismo tiempo que desgasta a las instituciones.
El funcionario recordó que el 4 de agosto del año pasado, México presentó una demanda civil contra los fabricantes de armas de fuego en Estados Unidos, por su comercio negligente y falta de controles para evitar que sus productos lleguen a la delincuencia organizada.
Compartió que el 12 de abril se realizará la audiencia donde se presentarán los alegatos ante el juez F. Dennis Saylor IV, en la Corte Federal de Boston, Massachusetts. Esta se dará luego de la presentación, réplica y contrarréplica de argumentos que ya ostentaron ambas partes
Esta es una demanda contra las empresas, no es una demanda contra el gobierno de Estados Unidos, las personas estadounidenses, ni su sistema jurídicoAlejandro Celorio
Detalló que se trata de una demanda en la que el Gobierno mexicano manifestó la existencia de un daño transfronterizo por estas actividades negligentes, al no tener cuidado en cómo se venden y distribuyen las armas.
A pesar de que México ejecutó su parte al reforzar sus acciones en las aduanas de la frontera común, además de perseguir a las organizaciones que comercian con las armas, Celorio opinó que las empresas que las manufacturan y distribuyen deben comprometerse a establecer mejores controles, para así evitar el tráfico ilícito desde Estados Unidos.
MAEP
