El gobernador de Texas, Greg Abbott, está en campaña y parte de su estrategia para las elecciones de noviembre próximo en Estados Unidos estará basada en el tema migratorio, ya que busca reelegirse, consideraron analistas internacionales.
“Él está en una campaña, en una campaña política. Es gobernador de Texas, entonces (…) en realidad lo que quiere hacer es una campaña”, aseguró el internacionalista Fausto Pretelin.
Con esto, el gobernador texano de 64 años de edad busca que el centro neurálgico de su campaña sea decirle a todo el país sobre las dificultades que atraviesa su administración en este tema.
“Esto es, de alguna manera, como una campaña bandera, cuyo eje central es la migración”, aseguró e incluso recordó que Abbott, quien gobierna Texas desde el 2015, ha amenazado con llevar a migrantes a la capital estadounidense para demostrar a la Casa Blanca todo el proceso de recepción y las dificultades.
El pasado 6 de abril, Greg Abbott anunció una serie de acciones para asegurar la frontera sur de Estados Unidos, a raíz de la decisión del Centro de Control y Prevención de Enfermedades (CDC, por sus siglas en inglés) de poner fin a las expulsiones migratorias bajo el Título 42.
“Este acercamiento de la fecha, que es en mayo, ha puesto muy molesto, en este caso, al gobernador de Texas, porque continuará avanzando el número de migrantes hacia su región”, agregó Pretelin.
El mandatario de Texas ordenó la detención e inspección de todos los tractocamiones y autobuses que cruzan desde México hacia Estados Unidos, argumentando medidas de control migratorio y seguridad fronteriza para prevenir el trasiego ilegal de drogas e indocumentados .
Las inspecciones se implementaron en los cruces fronterizos de Zaragoza-Ysleta; Córdova-De las Américas; Colombia-Laredo; Reynosa-Pharr, lo que generó que el flujo comercial y las cadenas de suministro se vieran afectadas.
Debido a la cercanía de Abbott con Donald Trump, Pretelin comentó que esta estrategia tiene “las huellas digitales” del expresidente estadounidense.
“La migración para demócratas y republicanos siempre ha sido incontrolable; el mejor ejemplo es el del 2001, con los ataques terroristas del 11 de septiembre; a partir de ahí, prácticamente sean demócratas o republicanos, los presidentes no han logrado sacar en el Congreso una reforma migratoria congruente con la realidad”, señaló el especialista.
También dijo que Abbott es un claro opositor de cualquier política de Joe Biden, al “bracear a contracorriente”.
Consultada al respecto, Eunice Rendón, directora de Agenda Migrante, coincidió en que la inspección tiene que ver con la política de cancelación del Título 42, ya que es una respuesta de Abbott en contra de Joe Biden, pues teme que los ingresos ilegales de personas aumenten.
“Quien dijo lo de la migración fue directamente el gobernador de Texas, ya que según él hay amenazas por la cancelación del Título 42. Greg Abbott dijo que enviaría a Washington autobuses con indocumentados para que fuera Joe Biden quien los atendiera. El gobernador dijo que hace la medida porque mencionó que tiene que frenar la entrada de armas, drogas y migrantes”, aseguró.
La activista también insistió en que es un tema político y de reelección, porque trata de hacer ver que el gobierno de Biden no ha sido eficiente y sí ha sido de puertas abiertas a la migración, y por ello lo hace, para mostrar un contrapeso.
“Lo hace también para hacer menos las promesas de Biden, porque es cada vez más lejano el tema de una reforma migratoria. Uno de los grandes temas de crítica de los republicanos es la migración y en eso se van a colgar”, señaló.
Pretelin agregó que, en esta administración, el desacuerdo en el tema migratorio entre ambos partidos va a persistir.
“Los demócratas no lo han manejado bien. Hay que decir que ni Biden, a pesar de que tanto criticamos a Trump; no ha logrado pasar en el Congreso una reforma migratoria y parece que no lo logrará, porque ya es un año electoral”, expuso.
Senadores rechazan medidas de control fronterizo
La Junta de Coordinación Política (Jucopo) del Senado rechazó las medidas de control fronterizo unilaterales adoptadas por el gobernador de Texas, Estados Unidos, Greg Abbott, lo que ha afectado las cadenas de suministro, miles de empleos y la calidad de vida de las personas de ambos lados de la frontera.
A través de una carta que el órgano legislativo envió a Abbott y a la vicepresidenta estadounidense, Kamala Harris, demandó que se restablezcan las condiciones habituales de vigilancia en el comercio.
Admitieron que ambas naciones enfrentan importantes desafíos, por la dinámica social y económica que se realiza a diario.
“Es imperativo continuar trabajando en la construcción de soluciones conjuntas a las problemáticas que compartimos, tales como la migración y el tráfico ilícito de sustancias tóxicas”, indicaron.
Subrayaron que la frontera entre México y EU es el territorio con más movimiento en el mundo, por la movilidad humana, el intercambio de bienes y servicios, y particularmente en el caso de Texas, el flujo comercial representa alrededor de 442 mil millones de dólares, en una frontera de mil 900 kilómetros y con 28 cruces internacionales.