En el primer año de la presente Legislatura, 16 diputados han brincado a otra bancada en San Lázaro, tras diferendos con sus partidos o por estrategia para fortalecer sus alianzas legislativas.
De los diputados que han recurrido al “chapulineo”, siete han pasado el primer año sin presentar una sola iniciativa propia, que contribuya a resolver un problema nacional o de la región en la que fueron elegidos.
En este primer tramo, el bloque opositor consiguió que cuatro diputados dejaran la coalición de la 4T, mientras que dos opositores se pusieron la camiseta guinda. El resto de los cambios ocurrieron principalmente en un intercambio entre la coalición Juntos Hacemos Historia.
El Partido Verde Ecologista de México (PVEM), aliado de la 4T, ha sido la bancada más golpeada por el “chapulineo”, con la pérdida de cuatro curules, quedando con 40 diputados.
En la bancada coordinada por Carlos Puente, tres diputados optaron por ser oposición en el PRD, PAN y Movimiento Ciudadano, y uno más se unió a las filas de Morena.
La primera baja de este grupo parlamentario ocurrió cuando la diputada Laura Fernández se pasó al sol azteca para contender por la gubernatura de Quintana Roo, por lo que pidió licencia y no alcanzó a presentar ninguna iniciativa. Después, Cuauhtémoc Ochoa se pasó a Morena y hasta la fecha no ha presentado propuestas propias.
Lo mismo ha ocurrido con Armando Gómez Betancourt, quien durante la primera semana pidió su cambio a Morena, pero semanas después regresó al PVEM.
Sin embargo, la fractura más grande en el Verde ocurrió con la discusión de la Reforma Eléctrica, cuando dos legisladores votaron en contra: Andrés Pintos y Alexis Gamiño. Aquél pasó a MC y ésta se quedó sin partido. Sin embargo, días después, Gamiño, quien era suplente, fue sustituida por la titular, Ali Núñez, que se incorporó a la bancada panista. Tras permanecer casi desde el inicio de la legislatura con licencia, no ha presentado ninguna propuesta propia.
En contraste, el grupo parlamentario de Morena ha sido el más beneficiado, con seis diputados que cambiaron de camiseta, dos de ellos de oposición. El primero en romper con su anterior partido fue Roberto Valenzuela, de Aguascalientes, quien acusó que estaba siendo amenazado por el exlegislador Javier Luévano, también albiazul.
El cambio más reciente fue el del expriista Carlos Miguel Aysa Damas, quien refrendó su unión a Morena tras anunciar su voto a favor de la Reforma Eléctrica.
En un año, ambos diputados han transitado en San Lázaro sin presentar ninguna iniciativa. Los otros cuatro diputados que se sumaron a Morena son de su misma coalición: Claudia Hernández Sáenz, Alfredo Porras y Olga Elizondo (PT), y Cuauhtémoc Ochoa (PVEM).
En el PT, tres curules pasaron a fortalecer al grupo parlamentario de Morena y uno más se fue al PRD, en el arranque de la Legislatura. Sin embargo, en la última semana de abril, la bancada guinda cedió tres curules de vuelta a los petistas, en una maniobra para que alcanzaran dos lugares en la Comisión Permanente.
- El dato: El PAN en el Senado criticó, el pasado 13 de abril, que el diputado Carlos Miguel Aysa Damas, cambiara su voto a favor de la Reforma Eléctrica, por una embajada para su padre.