“Es necesario un cambio”, manifiesta

Ejecutivo dice no a la doctrina Monroe

El mandatario confía en que su homólogo de EU, Joe Biden, se convierta en el conductor de la nueva política en la región; considera que es tiempo de la unión de los pueblos

El Presidente López Obrador durante su conferencia de prensa matutina, ayer. Foto: Especial

Tras señalar que es necesario un cambio en la política exterior del mundo, el Presidente Andrés Manuel López Obrador dijo ayer que, en el caso de América, no es posible ya continuar con la doctrina Monroe ni con la consigna de que “América para los americanos”.

“Ya no es posible seguir, en el caso de América, con la doctrina Monroe ni con la consigna de que ‘América para los americanos’, ni mantener pugnas que se originaron durante la Guerra Fría”, expuso.

Señaló que éste es el momento de inaugurar una nueva etapa en la relación de los países del continente, en donde predominen relaciones de amistad, de cooperación y de unidad de los pueblos, y no las hegemónicas, las de predominio, las injerencistas o las de imposiciones.

“Política, entre otras cosas, es tiempo. Es el momento y creo que la Cumbre (de las Américas) podría ayudar a iniciar una política nueva”, agregó.

López Obrador confió en que el mandatario estadounidense, Joe Biden, podría ser el líder que conduzca a una nueva relación entre los pueblos americanos.

“Creo que él podría dar este paso y hacer atrás toda esa política anacrónica, injusta, de subordinación, de falta de respeto a la independencia, a la soberanía de los pueblos, de los países”, mencionó.

Incluso, comentó que tiene el sueño de que, en Los Ángeles, en donde se realizará la Cumbre de las Américas a principios de junio próximo, se unan todos los países de la región, un punto de vista que comparten otros gobiernos.

“Repito, creo que el presidente que podría iniciar esta nueva etapa, convertirse en el conductor de esta nueva política en América, es el presidente Biden”, reiteró.

López Obrador aseguró esto momentos antes de la reunión virtual con el asesor especial para la Cumbre de las Américas, Christopher J. Dodd, con quien compartió su postura de no asistir a dicha reunión cumbre en caso de que no se convoque a todos los países.

De acuerdo con funcionarios estadounidenses, no se invitará a gobiernos que no respeten principios democráticos, con lo que Cuba, Nicaragua y Venezuela estarían excluidos, y, de prevalecer esta postura de Estados Unidos, México acudiría con una representación encabezada por el secretario de Relaciones Exteriores, Marcelo Ebrard.

López Obrador insistió en que su postura no es con afán de confrontar, sino de llamar la atención para encaminar los esfuerzos de los líderes del continente hacia la reconciliación, debido a que es un tiempo de oportunidad para recoger lo mejor en las relaciones de Estados Unidos con los países de América.

“No somos lo mismo, cada pueblo tiene su idiosincrasia, somos independientes, claro que vamos a tener diferencias, pero podemos dialogar, ponernos de acuerdo, resolver las controversias por la vía pacífica”, apuntó.

Finalmente, López Obrador dijo que la mejor política exterior es la interior, sin tanto protagonismo, porque también se puede hacer una política exterior con apego a principios, si la política interior es consecuente.