El Presidente Andrés Manuel López Obrador consideró que el cambio en la dirección del Aeropuerto Internacional de la Ciudad de México (AICM), de Carlos Morán por Carlos Ignacio Velázquez Tiscareño, era necesario para resolver las quejas y molestias de los usuarios.
“Se consideró necesario el cambio para resolver algunas discrepancias, molestias que había entre los pasajeros; mejorar el servicio y también dar una sacudida, ya llevaba mucho tiempo un sistema de administración, entonces hay que cambiar, hay que renovar y nos importa mucho la seguridad, el que no haya contrabando, el que no haya robos”, afirmó.
De acuerdo con el Presidente, durante el tiempo de la administración y vigilancia de la Policía Federal, dentro de las instalaciones del aeropuerto capitalino se registraba un importante número de robos, contrabando y tráfico de personas “había mucho desorden”, para evitar que continuaran esas prácticas se determinó el cambio y darle facultades a la Marina.
“De esta forma consideramos que van a mejorar las cosas, porque ya estaba ahí la Marina ayudando, pero había otras áreas que actuaban con las prácticas anteriores, del viejo régimen y por eso se decidió y vamos completo, a entregarle la responsabilidad, todas las facultades y todas las responsabilidades a la secretaría de Marina, y esa fue la decisión”, expuso el mandatario.
Agregó que la aplicación de tecnología por parte de los marinos ha permitido abatir los delitos en la terminal aérea. Además, se mejorará la atención en aduana para disminuir los tiempos de trámites y combatir al contrabando.
SAT NO PIDIÓ CONSTANCIA FISCAL
Durante la conferencia matutina, la Jefa del Servicio de Administración Tributaria (SAT), Raquel Buenrostro, aclaró que la dependencia no solicitó la Constancia de Situación Fiscal, sino únicamente el Código Postal y nombre correcto de los contribuyentes, como una medida para cerrarle el paso a las empresas factureras y ese documento no debe exigirlo el patrón.
“Eso fue una medida preventiva para las empresas factureras. Las empresas factureras o las empresas fantasmas, además de facturar gastos que no existen, también facturas nóminas que no existen, y las nóminas que emiten principalmente son jóvenes de 18 años o adultos mayores, ¿por qué?, porque muchos jóvenes de 18 años no están insertos en el mercado laboral, sino siguen estudiando y entonces aprovechan para generar nóminas falsas. Y también para adultos mayores. Nada más para que tengan una dimensión, porque son cientos y miles de empresas que hacen eso”, reveló Buenrostro.
Insistió que tampoco pueden condicionar el pago del salario a cambio de entregar la Constancia de Situación Fiscal y pidió a los trabajadores que sean afectados que denuncien ante el SAT esta situación, que es ilegal.
“Hay que decir, primero, que el SAT no pidió la Constancia de Situación Fiscal. La factura o el timbrado de nómina, lo único que tiene que contener es el código postal y el nombre correcto del trabajador y, si tienen el nombre correcto y el código postal, el patrón no les tiene por qué hacer exigible la Constancia de Situación Fiscal”, dijo la Jefa del SAT.
RFH