En momentos de crisis energética, alimentaria, económica y migratoria, el Presidente Andrés Manuel López Obrador debe tender puentes y lazos bilaterales con Estados Unidos, debido a que es su primer socio comercial y es necesario reforzar la relación, sin ceder en su soberanía, consideraron expertos en política nacional.
“No veo una incongruencia del Presidente; al contrario: se muestra abierto a Estados Unidos, sobre todo en el tema energético; esto es, les ayudará, pero sin ceder soberanía”, señaló, José Fernández Santillán, politólogo del Tec de Monterrey.
“No significa con sus propuestas un doblegamiento político, sino una definición en favor de la democracia y un acercamiento a ese país, para terminar las separaciones que se han generado en los últimos meses, además de que negocias las visas para los trabajadores mexicanos como moneda de cambio”, indicó.
El experto en ciencias políticas Horacio Cervantes coincidió en que México busca negociar el tema de los migrantes con apoyo energético, sobre todo en el marco de los problemas de abasto a nivel mundial, lo que puede traer beneficios a México.
“Hay que reconocer que el principal socio de México es Estados Unidos; por ello, la relación que se dé, en un marco de amistad, debe ser bueno”, dijo.
Para la internacionalista por el Tecnológico de Monterrey Arlene Ramírez Uresti, la propuesta más viable es la de los gasoductos, porque a Estados Unidos le urge resolver el tema energético.
La analista dijo que el mensaje que quisieron transmitir es “de certeza a los inversionistas y la lectura que tenemos que darle es que no está bien la relación México-Estados Unidos”.
Gonzalo Monroy, experto en materia energética, dijo que los planteamientos en materia energética que propuso el Presidente a su homólogo de Estados Unidos son poco factibles, debido a que la producción mexicana se encuentra debajo de los niveles necesarios para cumplir.
Consideró que la “cartera de buenas intenciones” que presentó el mandatario mexicano fue “tramposa”, ya que “el Gobierno sigue en franca hostilidad a todo proyecto que sea competitivo” con las paraestatales.
El politólogo José Antonio Crespo estimó que la visita del Presidente López Obrador a Estados Unidos busca resarcir su ausencia de la novena Cumbre de las Américas, pero ahora buscará sacar adelante, sobre todo, la agenda migratoria.
“Yo creo que busca compensar el hecho de que no haya ido a la Cumbre de las Américas (...) entonces, ahora él va a tratar de sacar adelante parte de esa agenda, sobre todo migratoria”, consideró.
Para Ramsés Pech, experto del sector energético, las propuestas que realizó López Obrador al presidente Joe Biden están fuera de la realidad actual y difícilmente se podrán concretar en el corto plazo.
Mencionó que lo que preocupa es definir de dónde saldrá el dinero para invertir en el tendido de las líneas de transmisión o saber en dónde se ubicarán los centros de almacenamiento en la frontera.