El Presidente Andrés Manuel López Obrador defendió el resultado de la gira que realizó por Estados Unidos, a la que calificó como “muy buena y favorable” para ambos países, porque, dijo, se lograron importantes avances, principalmente en materia migratoria.
“También hablamos de la necesidad de ampliar el número de visas de trabajo temporal para México, para Centroamérica. Esto se aceptó, se va a aumentar considerablemente el número de visas de trabajo para ingresar a Estados Unidos. Desde luego, el planteamiento de fondo fue el de impulsar las actividades productivas, el de unirnos para aumentar la producción en Estados Unidos, en México”, expuso.
El mandatario insistió en que se requiere que la migración sea ordenada, para evitar que las personas que se ven obligadas a abandonar su tierra no se conviertan en víctimas de la delincuencia organizada.
“Hablamos de cambiar la política migratoria, que no se deje suelta y haya vacíos que llenan los traficantes de personas, también por la conveniencia, como ha sucedido siempre, de empleadores sin escrúpulos en Estados Unidos, que prefieren tener indocumentados, porque les pagan menos, porque los pueden correr cuando quieren”, denunció.
Para garantizar, agregó, que se les respeten sus derechos humanos y, lo más grave, que pierdan la vida, tengan la certeza de que viajan seguros y recibirán un empleo, pues Estados Unidos debe reconocer que necesita la mano de obra de mexicanos y centroamericanos para producir y crear riqueza, y no viajen en las circunstancias actuales en que ponen en riesgo su integridad.
“Además que propicia violación de derechos humanos, accidentes graves, pérdidas de vidas humanas, que en vez de eso se ordene el flujo migratorio con visas temporales de trabajo, no sólo para el campo, sino también para los servicios, para la industria”, señaló el Presidente de la República.
El Ejecutivo desmintió que la modernización de aduanas, como se propuso, tenga como finalidad contener a los migrantes. Se trata, expuso, de agilizar el comercio y el cruce legal de personas.
“Algunos expertos hablaron de que nos impusieron ese plan, cuando llevamos ya tiempo proyectándolo y ya aplicándolo. ¿En qué consiste? Pues en mejorar las aduanas, que haya un mejor servicio. Incluye mejorar el tráfico en Tijuana, con un segundo piso en toda la zona fronteriza. Ya lo dijimos aquí, fuimos allá, es un proyecto que lleva tiempo, es una inversión de más de 10 mil millones de pesos”, explicó.
En Sonora se va a reubicar la aduana de Nogales y, en el lugar que actualmente ocupa, sólo será cruce de personas. Piedras Negras también será ampliada, así como una nueva aduana en Nuevo Laredo, donde se ubicará la oficina de la dirección de aduanas y se construirá una instalación militar.
López Obrador destacó que, en materia comercial, propuso una liberalización acelerada de aranceles, principalmente en productos alimenticios.
“Garduño no compró nada” en Neiman Marcus
El Presidente Andrés Manuel López Obrador arremetió de nueva cuenta en contra del periodista Carlos Loret de Mola por criticar al titular del Instituto Nacional de Migración, Francisco Garduño, tras haber visitado la exclusiva tienda Neiman Marcus.
En tono molesto, el Presidente demandó que no se realice periodismo irresponsable y que cada denuncia se acompañe de pruebas. En el caso de Garduño, el mandatario aclaró que ni siquiera lleva bolsas de las compras.
“Garduño se metió a una tienda creo que en el aeropuerto o cerca de un centro comercial, y le tomaron una foto y Loret de Mola miren lo que puso, o sea, entonces ya no van a poder ir a comprar nada los servidores públicos. Por cierto, dejó dicho Francisco Garduño que no compró nada”, aclaró el mandatario.
También respondió a las críticas por no haberse desabotonado el saco cuando se sentó en la oficina Oval de la Casa Blanca. “Toda esa formalidad casi monárquica los fascina. Que no me desabroche el saco, no pues se me iba a ver la panza y entonces, miren la panza por la barbacoa y por los tamales de chipilín, pero en fin”, enfatizó.
Abren a IP inversión en materia energética
México abrirá a la iniciativa privada la inversión en materia energética, pero la condicionó a que sea tutelada por la Secretaría de Energía, adelantó el Presidente Andrés Manuel López Obrador.
“Entonces, siempre y cuando la planeación esté a cargo de la Secretaría de Energía y el socio principal sea la Comisión Federal de Electricidad, pero se puede permitir la inversión extranjera en sociedad con la Comisión Federal de Electricidad”, aclaró el mandatario.
Explicó que los 40 mil millones de dólares que se anunció serán invertidos en nuestro país en los próximos dos años, tienen que ver con proyectos en materia energética.
“Los 40 mil millones se dirigirán fundamentalmente en el sector energético, se construirán ductos, plantas de licuefacción, plantas de fertilizantes y extracción de crudo en sociedad con Pemex, de acuerdo con las 110 concesiones que fueron entregadas durante la reforma energética de 2013”, explicó.
López Obrador reveló que también podrá haber inversiones en gas, en este caso, reveló que ya hay dos contratos firmados.
“En el caso de México hay dos contratos ya firmados: una planta de licuefacción en Ensenada, que son alrededor de cinco mil millones de dólares, y otra planta de licuefacción en Altamira, en el Golfo. Pero hay proyectos una en Puerto Libertad, en el Mar de Cortés, que ahora se llama Mar de Baja California, otra en Salina Cruz si se resuelve lo del derecho de vía para un gasoducto y otra en Coatzacoalcos. Entonces, todo eso es inversión”, abundó.
El Presidente agregó que también se realiza la construcción de plantas coquizadoras en Salina Cruz, Oaxaca, y Tula, Hidalgo, cuya inversión alcanza en conjunto seis mil millones de dólares, pero serán edificadas con presupuesto de Petróleos Mexicanos (Pemex) y no requerirán créditos.
Estas plantas permitirán procesar el combustóleo y convertirlo en gasolinas, por lo que ya no se producirá este combustible.
Ken Salazar defiende cercanía con AMLO
El embajador de Estados Unidos en México, Ken Salazar, salió al paso de las críticas a su actuación, debido a la estrecha cercanía que sostiene con el Presidente Andrés Manuel López Obrador.
“Mi trabajo es tratar de entender, conocer hacia dónde iba México y promover los intereses de los Estados Unidos”, afirmó el representante diplomático, al participar en un foro realizado en el Wilson Center de Washington.
El diplomático respondió a una nota publicada por el diario The New York Times, en la que altos funcionarios de la administración del presidente Joe Biden advirtieron que su cercanía con el mandatario mexicano podría resultar contraproducente para los intereses de EU.
En su edición del martes 5 de julio, The New York Times afirmó que “varios funcionarios estadounidenses califican de preocupante” la actuación y cercanía que muestra el embajador en México, porque “a veces parece contradecir las políticas de su propio gobierno por alinearse con el Presidente López Obrador”, se lee en el artículo del diario.
En respuesta, Ken Salazar recordó que “cuando el presidente Biden me pidió que fuera el embajador de Estados Unidos en México, todos, incluidos los embajadores más recientes allí, dijeron que no había forma en que pudiéramos tener un diálogo con Andrés Manuel López Obrador, que él no quería tratar con EU, por lo que había sucedido en el pasado”.
Su misión entonces consistió en lograr ese acercamiento y entendimiento con el Presidente de México y recordó que, gracias a ese trabajo, logró compromisos del Gobierno mexicano en materia de combate al cambio climático y promoción de las energías limpias. “Eso ha pasado, en parte, gracias a que he establecido una buena relación, con humildad”, dijo.
Sin embargo, el embajador estadounidense precisó que está “muy en desacuerdo con cómo describe a miembros del Senado de Estados Unidos, como el senador Bob Menendez, de modo que cuando se hacen esas críticas, no estoy de acuerdo con ellas y se lo digo al Presidente”.
Añadió que hay muchos otros temas en los que no está de acuerdo con el mandatario mexicano y seguirá señalando aquellos en los que sea necesario para cuidar los intereses de su país.
Cuestionado sobre las declaraciones de un grupo de senadores republicanos, que advirtieron que en México había una “erosión democrática”, Salazar aseveró que “la corrupción es la causa de muchos de los problemas del país. ¿Podemos decir que la corrupción se ha acabado? No; sin embargo, es un esfuerzo que se está llevando a cabo”.
Añadió que nuestro país tiene un largo historial de corrupción, “muy arraigada; eso ha trascendido por décadas y a varias administraciones. Es la raíz de los problemas que estamos viendo en toda América Latina, Centroamérica y en México”.
Otro tema del que expresó preocupación el representante del gobierno de Estados Unidos en México es la violencia que se genera contra los periodistas.
“Sin ellos no hay democracia libre; por lo tanto, se tiene que hacer más y nosotros seguiremos planteando este tema al Gobierno mexicano”, concluyó el diplomático.
fgr