Expertos en temas de migración lamentaron que el Gobierno federal sólo otorgue un aumento de dos millones de pesos para atender a los refugiados en México, debido a que el alza de flujos migratorios desde Centroamérica se sigue reflejando en la llegada de cientos de extranjeros a territorio nacional, que requieren protección.
En entrevista con La Razón, Gretchen Kuhner, directora del Instituto para las Mujeres en la Migración, aseguró que los recursos que se asignarán a la Comisión Mexicana de Ayuda a Refugiados (Comar) son insuficientes para el tamaño de problema que existe en el refugio, pues, dijo, nunca se ha visto un interés real de las autoridades federales en la materia.
“Hay muy pocos recursos para atender el refugio en México; no es de este año, sino de muchos que han dejado a dependencias como ésta al olvido en sus operaciones, a pesar de que necesitan recursos urgentes”, destacó.
La experta señaló que la prioridad de las autoridades es la contención y deportación, pero no el refugio de la gente.
“Ellos necesitan 150 millones, mínimo, para sus operaciones, pero Comar ha intentado la fusión con la Comisión de la Frontera Sur y no se ha hecho. El Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Refugiados siempre ha sido un salvavidas, aunque se ha convertido casi en obligación, más que una ayuda”, advirtió.
La crisis migratoria en México continúa y, a pesar del aumento de 60 por ciento, la Comisión Mexicana de Ayuda a Refugiados recibirá apenas 2.6 millones de pesos más de presupuesto en el 2023 para enfrentar la emergencia.
En los primeros siete meses del año fueron detenidas 206 mil 885 personas, 76 mil 820 más que en 2021. El exceso de ingresos de personas indocumentadas a México ha provocado que el Gobierno expida más visas humanitarias. Sólo de enero a julio de este año, la expedición de tarjetas pasó de 23 mil 931 en 2021, a 71 mil 286.
Javier Urbano, académico y experto en migración por la Universidad Iberoamericana, señaló que “son muy pobres” los recursos para la importancia que se tiene de atender a estas personas, pues llegan de países en donde huyen de la pobreza e inseguridad.
“La protección es prácticamente nula, lo que quiere decir que la atención es estática. Desde hace años, la Comar está rebasada en la cantidad de solicitudes que se ingresan y hacen lo que pueden, pero necesitan recursos para atender a todos, pues, si no se hace, los migrantes optan por otras posibilidades de apoyo”, subrayó.
En este tenor, aseguró que los extranjeros que no son atendidos buscan, en su desesperación, ser traslados por polleros, a pesar de los riesgos, lo que acrecienta los flujos irregulares por el país, los cuales impactan en los estados del norte.
Mencionó que en muchos países es normal que la ONU apoye con recursos, pero en México se ha vuelto un sustituto, lo que “es vergonzoso” para la política migratoria.
“Es escandalosa la cantidad para temas como el Tren Maya o el Aeropuerto e irrisorio para la Comar. (El Gobierno) se va con la promesa de ayuda a los migrantes, que simplemente no se volvió a realizar”, aseveró.