El Presidente Andrés Manuel López Obrador aseguró que la corrupción no era una pandemia, sino una peste que estaba acabando con México.
"Queremos ser autosuficientes y ya no vamos a vender crudo y comprar gasolinas, ya no, ya producimos gasolinas y diesel, para eso era necesario que se acabara con la corrupción, porque eso no era una pandemia, sino que era una peste que estaba acabando con México"Andrés Manuel López Obrador, Presidente de México
Durante la supervisión de avances de la refinería Tula, desde Hidalgo, dijo que ya se tienen que ir los corruptos, sean del sector público o privado extranjero a robar a otra parte, porque México ya no es tierra de conquista. “Saben, como ya no hay corrupción hay presupuesto suficiente, y que esto no es con crédito”, dijo.
El Presidente López Obrador agregó que ya hay una Hacienda pública fuerte con presupuesto, “y no necesitamos aumentar impuestos, ni aumentar el precio de las gasolinas, acuérdense que hoy es más barata en México que en Estados Unidos.
Detalló que esa planta había quedado inconclusa, pues se habían destinado cerca de 2 mil 500 millones de dólares en la compra de equipos de tanques y de otros insumos para construir esta coquizadora, pero al llegar estaba parada la obra porque se necesitaban 2 mil 500 millones de dólares más y tenían que decidir.
“Dejar que se pudrieran los equipos adquiridos y que se convierten en chatarra o invertir para terminar esta planta, ya que se trata el combustóleo y se convierte en gasolina, lo que se traduce en más ganancias para Pemex que es una empresa de la nación"Andrés Manuel López Obrador, Presidente de México
El Presidente López Obrador dijo que con esta planta tratando el combustóleo hay menos contaminación, y señaló que es necesario cuidar el medio ambiente y las generaciones venideras, ya que es una de las regiones más contaminadas en el país y en el mundo, “por eso, no titubeamos, decidimos invertir los 2 mil 500 millones de dólares y reiniciar la construcción”, añadió.
Adelantó la construcción de una planta en Coatzacoalcos y Altamira “y va a seguir habiendo trabajo”, y aseguró que va a terminar su gobierno ya que lo va a ayudar el creador, la naturaleza y la ciencia”.
Señaló que le faltan dos años de gestión, pero como trabaja 16 horas diarias los siete días de la semana, es como si le faltaran cuatro años. “No a la reelección porque yo soy maderista. Vamos a dejar sentadas las bases para que no puedan darle marcha atrás nunca más, para una minoría rapaz”, concluyó.
DGM