Expertos en temas migratorios chocaron por la recepción que el Gobierno de México hará de migrantes de Venezuela en la frontera norte, pues aseguraron se violan sus derechos humanos a costa de negociar más permisos para mexicanos a Estados Unidos y se crea un cuello de botella en los estados del norte que impacta directamente en los albergues.
En entrevista con La Razón, Gretchen Kuhner, directora del Instituto para las Mujeres en la Migración (Imumi), comentó que el país vecino del norte sigue responsabilizando a México de la migración irregular, y por ello viola todos los derechos humanos al proyectar regresarlos a la frontera común, para que nuestro país se haga cargo de ellos.
“Le siguen echando el problema a México, por supuesto, y el gobierno sigue aceptando a las personas con la justificación de razones humanitarias, cuando en realidad persiste el tema de contención y control total en la llegada y tránsito de personas.”, explicó.
La activista mencionó que los venezolanos deben inscribirse en una plataforma —que no han dicho cuál—, comprobar que estuvieron en México y contar con alguien que los pueda recibir en Estados Unidos y que tenga solvencia, además de encontrarse en buen estado de salud.
“El programa de venezolanos es una cosa, otra es que van a aceptar personas expulsadas bajo el Título 42, y la otra que, a cambio, Estados Unidos puede ampliar las visas H2B, que son para personas mexicanas. Lo que intentaron decir es que están negociando con los migrantes que atraviesan México, para que les den beneficios a los connacionales que llegan a ese país a trabajar”, indicó.
El gobierno sigue aceptando personas con la justificación de razones humanitarias, cuando en realidad persiste el tema de contención y control total en la llegada y tránsitoGretchen Kuhner, Directora del Imumi
Al respecto, el director de Pueblo sin Fronteras, Irineo Mujica, mencionó que las 65 mil visas que se van a entregar para regular la migración es una contradicción, pues desean controlar a la gente que llega por tierra, beneficiando a los que se pueden costear un vuelo.
“Lo que está haciendo es deportar a México a personas bajo el Título 42, y es una contradicción, porque obliga a lidiar al país con la gente que no puede pasar, lo que crea un cuello de botella en los estados del norte”, indicó.
El activista comentó que, a pesar de que digan que es por razones de humanidad, darles cobijo a los venezolanos que no puedan pasar a Estados Unidos en realidad es una expulsión masiva que viola la ley y los derechos humanos de las personas en contexto de movilidad.
Leticia Chávez, secretaria de la Comisión de Asuntos Migratorios de la Cámara de Diputados, consideró que en nada se vulnera al país por recibir a venezolanos expulsados de Estados Unidos, aunque precisó que el impacto se verá específicamente en los albergues del norte. Por ello, aseveró que deben darse apoyos para que puedan atender a esa población.