El Gobierno de México ofreció una disculpa pública a la familia de la defensora de derechos humanos, Digna Ochoa por las omisiones, falta de protocolos y al debido proceso, así como ausencia de justicia en el asesinato de la activista el 19 de octubre de 2001 en la Ciudad de México.
“Acudo en representación del Estado mexicano a este acto de responsabilidad y disculpa pública de Digna Ochoa y su familia. Quiero externar su reconocimiento a la familia que por dos años ha buscado la justicia”, dijo Alejandro Encinas, subsecretario de Derechos Humanos, Población y Migración.
El funcionario explicó que el acto reivindica su compromiso y labor en la defensa de los derechos humanos y más desprotegidos, pues era una defensora apegada a principios y con fuerte convicción social. “Ha dejado un legado en los pueblos campesinos y en muchos ámbitos en la defensa de derechos humanos que han sido eventos relevantes donde se ha marcado una trayectoria de profesionalismo con los que menos tienen”, dijo.
Encinas Rodríguez detalló que el Estado no pudo garantizar su seguridad y tampoco garantizó su acceso pleno a la justicia. “Ofrezco una disculpa por los protocolos fallidos, faltas la debido proceso y diligencias, porque su lucha y memoria no pueden ser discriminadas por su género, cultura o carácter militante”, aseveró.
Señaló que como lo recomendó la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) implementarán todas las acciones para reabrir la investigación penal y dentro de un plazo razonable, esclarecer los hechos y determinar las causas de la muerte.
El secretario de Gobierno de la Ciudad de México, Martí Batres informó que a partir de este día, la calle Gabriel Hernández, ubicada frente a la Fiscalía capitalina cambia de nombre a Digna Ochoa y Plácido, en la colonia Doctores.
“Se modifica la calle Gabriel Hernández en el tramo comprendido entre Dr. Lavista y avenida Rio de la Loza por calle Digna Ochoa y Placido en la colonia doctores de la alcaldía Cuauhtémoc”, indicó.
Por su parte, la senadora Olga Sánchez Cordero aseveró que a su generación le tocó escuchar la versión más autoritaria de país, una versión en la que se revictimizaba y era el primer sospechoso de articular la violencia homicida y feminicida, sobre todo por las voces de oposición.
“A Digna Ochoa siempre la vamos a recordar como una guerrera de la defensa de los derechos humanos ante las arbitrariedades de los gobiernos anteriores. Nunca enmendó el terreno a pesar de las amenazas de caciques locales, siempre clara, dispuesta y digna de enfrentar riesgos hasta que las inercias la alcanzaron y revictimizaron con el manto de la impunidad”, dijo.
La senadora de Morena aseguró que ese país ha quedado atrás y aunque hay todavía muchos riesgos, las amenazas ya no provienen del Estado. “Esperamos que ese México autoritario ya no regrese jamás”, agregó.
Mientras que Martha Yuridia Rodríguez, comisionada Ejecutiva de Atención a Víctimas señaló que hace 21 años se cometió un crimen de un estado que se oponía a reconocer los derechos humanos, pues el sistema generó una verdad políticamente cómoda y encaminada a denostar la imagen de Digna Ochoa y sustentar ante la opinión la versión de suicidio.
FBPT