La Ley de Ingresos 2023 instruye transferir remanentes a la Tesofe

Fonsabi, en desmantelamiento; se esfuman 110 mmdp

PEF para 2023 deja sin recursos fondo que atiende 66 enfermedades crónicas o catastróficas de personas sin seguridad social; en 2018 había 110 mil millones y en junio de este año ya sólo tenía 37.8 mmdp; ONG advierten vulnerabilidad de pacientes

Alistan desmantelamiento del Fonsabi; le quitan 110 mil mdp Foto: Especial

La falta de recursos para el próximo año y el traslado de sus remanentes a la Tesorería de la Federación (Tesofe) llevarán al Fondo de Salud para el Bienestar (Fonsabi) a su desmantelamiento.

De hecho, el Proyecto de Presupuesto de Egresos de la Federación (PEF) 2023 dejará al sistema de salud mexicano sin fondos para esta instancia, responsable de destinar recursos públicos para atender 66 enfermedades crónicas o catastróficas de las familias sin seguridad social, así como enfrentar emergencias sanitarias.

Estudios realizados por México Evalúa, el Centro de Investigación Económica y Presupuestaria (CIEP) y el Centro de Análisis e Investigación Fundar, alertan que este fondo no contará con más recursos y la situación de vulnerabilidad en la cual se quedarán miles de personas que padecen una enfermedad de alta especialidad, como cáncer, VIH-sida, infartos agudos al miocardio o trasplantes de riñón, hígado y pulmón.

La iniciativa de Ley de Ingresos de la Federación para el Ejercicio Fiscal 2023, en el apartado “otras medidas”, establece: “Se estima necesario mantener en el artículo décimo cuarto transitorio la disposición que faculta al Instituto de Salud para el Bienestar a instruir la institución fiduciaria del Fondo de Salud para el Bienestar para que, durante el primer semestre de 2023, concentre en el Tesofe el remanente del patrimonio de ese Fideicomiso a que se refiere el artículo 77 bis 17 de la Ley General de Salud”.

Con este planteamiento, enviado por el Gobierno federal, se advierte que en el primer semestre del siguiente año se habrá liquidado el Fonsabi, y la administración federal habrá “consumado la apropiación” de más de 110 mil millones de pesos que tenía ese fondo a finales del 2018 y que sirvieron para pagar dos años la emergencia de la pandemia, afirmó México Evalúa.

Voces como la de la diputada priista Frinné Azuara Yarzábal cuestionaron estas acciones porque, desde el inicio de esta administración, una de las situaciones más constantes es la disminución de recursos para la atención de salud de la población, lo cual ha provocado que no se brinden consultas, tratamientos y entrega de medicamentos para el cáncer de mama.

En el marco del Día Mundial de la Lucha contra el Cáncer de Mama, dijo que esta enfermedad cada día ocasiona la muerte de 18 mujeres y, al año, suman ocho mil decesos. Por eso son necesarios los recursos del Fonsabi, para atender esta situación.

Explicó que, antes, el Fondo de Protección contra Gastos Catastróficos, el cual desapareció y dio paso al Fonsabi, funcionaba para atender cánceres de mama y cérvico uterino. Ahora, afirmó, “el Fondo de Salud para el Bienestar, que se dedicaba a dar recursos para la atención de esos casos, se le han sustraído 73 mil millones de pesos que no se sabe en qué los ha utilizado puntualmente el Gobierno”.

Para dar un ejemplo de la ayuda que daba este fondo y la situación en la cual pueden quedarse quienes recibían la atención, que no tienen seguridad social, el CIEP, en su estudio, refirió que por casos de cáncer cérvico uterino en 2018 y hasta junio de 2019, con este fondo fueron atendidos dos mil 389 casos y se pagaron 79 millones de pesos.

Por cáncer de mama, en el mismo periodo fueron: siete mil 100 casos y erogaron mil 572.2 millones de pesos; VIH-sida, 94 mil 400 casos y pagaron tres mil 11.5 millones de pesos.

En su estudio, el centro estableció que en el 2020 el Fonsabi pagó un total de cinco mil 642 millones de pesos para atender 25 enfermedades de alta especialidad.

De acuerdo con los análisis de Fundar, en el 2021, cuando ya se pretendía retirar más fondos al Fonsabi, existían “muchas inconsistencias para saber a cuánto asciende exactamente el remanente que quieren retirar y cómo se podrá dar seguimiento a la ejecución, gasto y destino del mismo, una vez que sea enviado a la bolsa común de la Tesofe”.

Desde entonces, los integrantes del centro de estudios pidieron a los legisladores analizar ampliamente las consecuencias de aprobar las transferencias de esos recursos para otros temas.