Es la crónica de un fracaso anunciado, dicen especialistas

Detectan en nuevos libros de SEP contenidos “fuera de la realidad”

Integran lenguaje y actividades que no corresponden al nivel cognitivo en primeros años, señalan expertos; ven “fracaso anunciado”

SEP prepara libros de texto con contenidos “fuera de la realidad” Especial

Los borradores de libros de texto del nuevo plan de estudios integran contenidos, lenguaje y actividades que no corresponden al nivel cognitivo y motriz de los primeros grados escolares, así como planteamientos “fuera de la realidad” de las comunidades y familias mexicanas en la actualidad.

Con un pilotaje en pausa que no permite evaluar su aplicación e identificar posibles errores y mejoras, el nuevo modelo educativo ahora es visto por expertos académicos como “la crónica de un fracaso anunciado”.

En una revisión hecha por La Razón a los seis libros que aún se encuentran en proceso de edición, se identificaron los temas y abordajes que propone la Dirección General de Materiales Educativos.

Estos libros están dirigidos al primer grado de primaria, correspondiente a la fase tres de la nueva estructura curricular, para comenzar la incorporación gradual del nuevo plan de estudios en el ciclo escolar 2023-2024.

Los libros, que van de 86 hasta las 367 páginas, con los que interactuarán menores que rondan los seis años de edad proponen contenidos que mezclan matemáticas con artes, lenguaje, ciencias naturales, geografía, economía y otras asignaturas, a la par que sugieren actividades para realizar a nivel comunidad, escuela y aula.

En una edad en la que los menores apenas comienzan a construir la noción temporal del antes, ahora y mañana, así como el reconocimiento de los números y sus formas, el libro de Saberes ya aborda las medidas longitudinales, figuras geométricas, hasta equivalencias y que se mezclan con otras asignaturas.

Uno de los problemas que tienen los libros es que están dirigidos al niño, pero los términos, la estructura del lenguaje, está fuera de la edad de ellos, como para tercero o cuarto grado
Irma Villalpando<br>Doctora en Pedagogía

“Uno de los problemas que tienen los libros es que están dirigidos al niño, pero los términos, la estructura del lenguaje, está fuera de la edad de ellos, como para tercero o cuarto grado. No tiene que ver nada con la inteligencia, sino con la etapa de desarrollo de los niños de primer año. La sintaxis es larga y a ellos hay que darles frases cortas”, comentó al respecto la doctora en pedagogía, Irma Villalpando.

Aunado a esto, los libros proponen actividades como realizar exposiciones, entrevistas con especialistas y fabricar artefactos que requerirán la intervención de un adulto, por lo que el niño pasará a ser un espectador o un sujeto pasivo en la actividad, a causa de las limitantes naturales en la capacidad motora que se tiene a esa edad, señaló la especialista.

Una de las dinámicas que propone el libro para el escenario escolar es que los niños construyan refugios para insectos, luego deberán dividirse en equipos y realizar bitácoras quincenales o mensuales del monitoreo para registrar las condiciones y después exponer los resultados.

Con el fin de educar en materia ambiental, el libro Comunitario propone a los niños identificar problemas en el manejo de la basura, organizar una campaña de limpieza, mantenimiento y modificación del entorno.

Para cumplir con la amplia lista de actividades, los alumnos de primero de primaria deberán discutir sobre la clasificación de la basura. El borrador incluso ofrece como apoyo documentos de la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales, cuyo contenido y lenguaje no está enfocado a niños.

Se propone que los niños realicen refugios para insectos y den seguimiento.

El punto final será un proyecto en el que redactarán los objetivos y acciones, también prepararán un discurso para exponer su actividad a la comunidad y semanas después deberán evaluar el impacto que esto tuvo.

“Son actividades para niños más grandes. Están jalando temas que no son de primero, como la elaboración de una carta, creo que lo hacen, no por desaparecer los grados, pero sí para tener una articulación amplia, que algunas actividades las hagan niños chiquitos con más grandes, pero esta reforma va a comenzar sólo con el primer año, no lo podrán hacer con otros grados y es una complicación”, dijo Irma Villalpando.

“En general, las actividades terciarias están ubicadas en establecimientos, empresas, o bien, permiten la interconexión y la movilidad de mercancías, capital, personas e información. En este grupo se incluyen los transportes, las comunicaciones y el comercio, entre otros servicios”, se lee entre los libros.

Las actividades propuestas en los libros son para niñas y niños más grandes.

De los seis materiales, la especialista consideró que el único adecuado fue el de Lenguajes, donde se ofrecen textos y diseños atractivos para acercar a los menores no sólo al conocimiento inmediato de su entorno, sino también a la reflexión sobre la igualdad de género, derechos humanos y más.

“Ese sí es un libro de primer año, está bien colocado, por el tamaño de la letra, no está saturado. Lo que te dice esto es que dividieron a los equipos y unos hicieron unos libros y los demás, otros. Hubo un equipo mejor colocado en la edad y a otros les faltó expertiz en el diseño”, consideró.

No obstante, advirtió que los materiales recibirán una “fuerte crítica” por parte de especialistas, dado el grado de especialización con el que algunos ejercicios y textos aparecen.

“Es una propuesta audaz porque se avienta con muchos contenidos y proyectos, pensando que la comunidad apoyará. Yo lo siento fuera de la realidad, por los tiempos y formación de los maestros, espacios que necesitan los padres. Se oye bonito, pero tendrá bastantes obstáculos, dan cosas por sentado que en verdad no son tan fáciles”, comentó.

La sintaxis es larga y poco acorde para menores que rondan los 6 años de edad.

Para Carlos Ornelas, profesor de Educación y Comunicación en la UAM, la premura y el clima en el que se desarrolla esta nueva reforma educativa es la “crónica de un fracaso anunciado”.

En entrevista, advirtió que los docentes terminarán por seguir adelante con el modelo que actualmente se implementa, pues es lo que ha ocurrido con las reformas educativas que se han dado desde el gobierno de Manuel Ávila Camacho.

Ante el freno a la prueba piloto por una orden judicial, que hoy tendrá una resolución definitiva, y con la firmeza de la Secretaría de Educación Pública (SEP) para no dar marcha atrás al plan educativo, Carlos Ornelas consideró que a estas alturas resultaría “irrisorio” plantear propuestas.

“Es un gobierno cerrado que a veces no se escucha a sí mismo. El proyecto tiene más para el fracaso que para el éxito. Uno de los compromisos del Presidente, desde 2017 en Zacatecas era centralizar el pago de la nómina educativa, están en eso, pero no les alcanza. El tiempo se viene encima, las tradiciones y prácticas docentes en esencia seguirán siendo las mismas”, concluyó.