Los trabajadores de México podrán gozar, a partir del próximo año, de 12 días de vacaciones después del primer año y sólo se podrán dividir y no ser en periodos continuos en caso de que así lo decidan ellos.
Ayer, el pleno del Senado aprobó, por unanimidad, con 116 votos, el dictamen sobre las llamadas vacaciones dignas, luego de que por la mañana fue avalado en las comisiones de Trabajo y Previsión Social, y Estudios Legislativos, Segunda.
El morenista Napoleón Gómez Urrutia, quien preside la Comisión de Trabajo, aseguró que con este dictamen se saldó una deuda histórica, y precisó que ya quedó claro en el dictamen que, después del primer año, los trabajadores tendrán derecho a 12 días de vacaciones continuos.
“Los derechos de los trabajadores no se negocian y sólo los trabajadores tendrán el poder y la libertad de decidir respecto a cómo gozar sobre la distribución de dichos periodos. Las y los trabajadores mexicanos merecen un descanso digno que les permita prevenir diversas enfermedades por agotamiento y estrés, además de mejorar su calidad de vida y contribuir a mejorar la productividad de sus labores”, manifestó el legislador.
Destacó que el propósito de esta reforma es “otorgar a los trabajadores la libertad, completa potestad para decidir la forma y tiempos en que disfrutarán los días de vacaciones que tengan a su favor".
“De este modo, los únicos que pueden disponer de la distribución de sus vacaciones serán las y los trabajadores, dándoles así el poder y la libertad de decisión respecto a cómo aprovechar los derechos que, como trabajadores y personas trabajadoras, les correspondan”, dijo.
Gómez Urrutia subrayó que es evidente lo relevante, histórico, impostergable que es la aprobación de este dictamen.
Patricia Mercado, de Movimiento Ciudadano, señaló la importancia del acuerdo alcanzado con la Cámara de Diputados para corregir la minuta y que se restableciera la redacción original que hizo el Senado sobre la continuidad de los 12 días, sin fraccionarlos, como lo determinaron en San Lázaro.
“Éste es el derecho que nadie puede regatear y que, efectivamente, como se ha dicho aquí, los derechos no se negocian, se establecen, se reconocen y se ejercen. Y la negociación que hubo con la Cámara de Diputados es que, efectivamente, terminara la redacción diciendo que finalmente es potestad de los trabajadores cómo gozan de estas vacaciones”, indicó.
El reclamo hacia los diputados de la mayoría legislativa en San Lázaro también provino de una bancada aliada, la del Partido Encuentro Social (PES), en voz de la senadora Marcela Mora, quien criticó que modificaran el planteamiento original y reprochó directamente al líder de la bancada del guinda en la colegisladora, Ignacio Mier, por su actuación.
“Suscribo lo que han señalado los senadores que me precedieron, el extrañamiento de Ricardo Velázquez, Germán Martínez, Geovanna Bañuelos, hacia la cámara revisora; también del senador coordinador de la bancada del PAN (Julen Rementería). Que la nación se lo demande, diputado (Ignacio) Mier, su forma de conducirse a veces es lejana al espíritu progresista del instituto político que lo acoge”, expresó.
DGM
