El secretario de Relaciones Exteriores, Marcelo Ebrard, advirtió que a pesar de la expulsión del embajador en Perú, Pablo Monroy, el gobierno federal no variará su posición.
“Me informa Pablo Monroy Embajador en Lima que el Gobierno de Perú le ha fijado 72 horas para salir del país. Encuentro esa decisión infundada y reprobable. La conducta de nuestro embajador ha estado apegada a derecho y al principio de no intervención. México no variará su posición”, advirtió el canciller en un mensaje publicado en Twitter.
La molestia del gobierno peruano es porque se brindó el asilo político a la señora Lilia Ulcida Paredes Navarro, esposa del depuesto Presidente Pedro Castillo y a sus dos hijos, a quién acusa de coautoría en el delito de organización criminal.
“El Gobierno del Perú reitera de manera enfática que no existe persecución política en el país y que impera el Estado de derecho, la separación de poderes y el respeto a las garantías de la administración de justicia, incluyendo el debido proceso. La investigación preparatoria que se le sigue a la señora Paredes está referida a la presunta comisión de un delito común”, expuso el Ministerio de Relaciones Exteriores del Perú.
Agregó que con base en la Convención de Caracas sobre Asilo Diplomático de 1954, se decidió conceder el salvoconducto que permitirá a la señora Paredes Navarro, poder abandonar el país, pero advirtió que se reserva el derecho de solicitar una extradición a nuestro país, como lo establece el Tratado firmado entre ambas naciones en 2021.
DGC