El presidente de la Junta de Coordinación Política del Senado, Ricardo Monreal, advirtió que es necesario revisar el acuerdo establecido con Estados Unidos y que en los hechos convierte a México en un tercer país seguro, porque representa recibir en el territorio nacional a más de 400 mil migrantes al año.
Señaló que tras revisar los acuerdos alcanzados en la Cumbre de Líderes de América del Norte, el Senado revisará las conclusiones alcanzadas, ya que dijo que existe preocupación, sobre todo por lo que corresponde a los temas acordados en materia migratoria y de combate a las drogas.
“Es una cantidad de 30 mil por mes, cuando menos [...] y eso nos preocupa por los habitantes y por los gobiernos de las fronteras que no tengan capacidad económica para albergar, para alimentar a tanta persona que está en espera de ser aceptado en Estados Unidos"Ricardo Monreal, coordinador de los senadores de Morena
El aspirante a la presidencia señaló que aproximadamente el país recibiría a 30 mil migrantes al mes, lo que equivale a 400 mil personas al año, por ello, afirmó que hay una gran posibilidad de que los municipios "no tengan la capacidad económica, social e incluso humanitaria o de vivienda" para albergar a tantos ciudadanos que buscan llegar al otro lado.
Ante los medios de comunicación, el senador señaló que el otro rubro delicado es el del tráfico de drogas, del que en la cumbre se limitaron a señalar solamente el tema del fentanilo y su introducción a Estados Unidos; sin embargo, dijo que el problema es mucho más grave, sobre todo por el crimen organizado.
“Pero es mucho más profundo que eso, es la delincuencia organizada, que ahora ha modificado sus propias actividades, cobrando no sólo el derecho de piso, el secuestro, las extorsiones que se siguen presentando, lamentablemente, a pesar del esfuerzo del Gobierno federal y de los estados y municipios, y que reduce Estados Unidos a la muerte de más de 100 mil compatriotas que consumen esta droga y que es mortal, el fentanilo. Es mucho más profundo y la introducción de armas ilegales a nuestro país”, sostuvo.
El también coordinador de Morena en el Senado comentó que en reuniones que hoy sostendrá, una de manera virtual y otra presencial, en la sede de la Secretaría de Relaciones Exteriores (SRE), también buscarán abordar con más detalle otro asunto que quedó pendiente, que es el tema energético, prioritario para Canadá, y respecto al cual consideró que se debe evitar llegar a los paneles.
“Fue excluido al final, pero es un tema que nos va a tronar si no tenemos la solución y las conversaciones diplomáticas entre los dos países”, indicó.
No hay recursos para recibir a 30 mil cada mes, advierten
El Grupo Parlamentario Plural del Senado advirtió que no existen recursos suficientes para que México reciba a 30 mil migrantes de Cuba, Nicaragua, Haití y Venezuela, expulsados por Estados Unidos.
A través de un posicionamiento, el grupo parlamentario, conformado por Emilio Álvarez Icaza, Nancy de la Sierra, Gustavo Madero y Germán Martínez, puntualizó que los presupuestos del Instituto Nacional de Migración (INM) y de la Comisión Mexicana de Ayuda a Refugiados (Comar), para 2023, no consideran dichos gastos.
Detallaron que para este año, el INM contará con mil 769 millones de pesos, es decir, 1.4 por ciento más que en 2022; mientras que la Comar tendrá 48 millones de pesos, que representan 0.8 por ciento más que el año pasado.
La bancada de senadores independientes refirió que los municipios fronterizos como Tapachula, Tuxtla Gutiérrez, Ciudad Juárez, Nogales, Reynosa, Tijuana, Mexicali, no tendrán un solo peso extra para atender a personas en condición migratoria.
“Las personas migrantes viven en tiendas de campaña improvisadas, cartones, plásticos; sin servicios públicos de salud; sin ayuda alguna para agua o alimentos; víctimas de la delincuencia organizada y de la trata de personas.
“Las organizaciones de la sociedad civil no se dan abasto para su atención y encima son hostigadas por personal de migración, Guardia Nacional y elementos de seguridad federales, estatales y municipales”, indicó.
GPP señaló que los tres niveles de gobierno retiraron toda ayuda para atender a la migración, por lo que cuestionó de dónde saldrán los recursos suficientes para atender a las 30 mil personas que expulsará mensualmente EU.
“La reciente Cumbre de América del Norte se lava las manos. No hay un solo programa concreto ni una cifra en miles de millones de dólares comprometida para atender a mujeres y hombres de todas las edades que acampan en México, producto de la violencia o la situación económica en sus países de origen e incluso de nuestro propio país que han sido desplazados por la violencia”, apuntó.
ONU: nuevas medidas de control amenazan los DH
El Alto Comisionado de la ONU para los Derechos Humanos, Volker Türk aseguró que las nuevas medidas de control fronterizo que impuso Estados Unidos, corren el riesgo de socavar los cimientos básicos de los derechos humanos internacionales y el derecho de los refugiados.
En un posicionamiento comentó que las vías legales ampliadas para algunos no pueden reemplazar los derechos de todas las personas a buscar asilo y protección. “El derecho a buscar asilo es un derecho humano, sin importar el origen de una persona, su estatus migratorio o cómo llegó a una frontera internacional”, comentó el Alto Comisionado.
De acuerdo al organismo internacional los cambios anunciados incluyen un mayor uso de deportaciones aceleradas y la expansión del uso de la orden de salud pública del Título 42 para permitir la expulsión rápida a México de unos 30 mil venezolanos, haitianos, cubanos y nicaragüenses cada mes. Recordar que la política del Título 42 comenzó durante la administración del expresidente Donald Trump a pretexto de evitar la entrada de miles de migrantes por la emergencia sanitaria por Covid-19, por ello, se expulsa de manera inmediata, sin cortes, juicios o posibilidad de pedir asilo o refugio al vecino del norte, en muchos casos a México, que es de donde cruzan de manera ilegal.
Volker Türk señaló que, si bien en meses anteriores se extendió el programa a los originarios de Venezuela, ahora se ampliará para incluir a los ciudadanos de Cuba, Haití y Nicaragua, lo que permitirá que unas 30 mil personas por mes de estos cuatro países vayan a los Estados Unidos por un tiempo limitado por un período de dos años con estrictas condiciones de elegibilidad.
A pesar de ello mencionó que las personas que realmente necesitan de la protección y asilo por parte de Estados Unidos, no cumplen con la totalidad de los requisitos para tener una oportunidad de desarrollo.
Pide a Congreso de EU resolver crisis migrante
El embajador estadounidense en México, Ken Salazar, aseguró que es tiempo de dejar de usar a los migrantes en el avance de temas políticos en México y Estados Unidos.
En un mensaje en su residencia oficial, tras el término de la Décima Cumbre de Líderes de Norteamérica, pidió al Congreso de su nación buscar soluciones para terminar con la crisis migrante que afecta a ambos países.
“Comentaba el presidente Joe Biden que el Congreso de Estados Unidos debe hacer su deber, deben buscar soluciones. Es tiempo de dejar de usar a los migrantes para avanzar en metas políticas; no se debe hacer en Estados Unidos o en México”, consideró.
Advirtió que la migración atraviesa por un momento “grave” y por ello dijo que debe existir un proceso ordenado, en el que se vea el asunto de manera regional; esto es, entre México, Estados Unidos, Canadá y otras naciones.
“En estos días vinieron amigos míos, fueron a la frontera; tres demócratas y una independiente, así como cuatro senadores republicanos, y ojalá puedan hallar una solución para la migración, para las inversiones que se necesitan entre México y Estados Unidos. Esa será la responsabilidad del Congreso, que nos ayuden”, agregó.
Reconoció que, como nunca antes, se ha visto un fuerte aumento en los flujos migratorios hacia su país, y reconoció que no sólo afectan a Estados Unidos, sino también a México, por lo que señaló que se debe contar con un sistema seguro, ordenado y que proteja los derechos de la gente que migra.
El 6 de enero pasado, Joe Biden anunció un plan para recibir a 30 mil migrantes cada mes de Cuba, Haití, Nicaragua y Venezuela, aunque anticipó que endurecería las restricciones en la frontera con México.
“Hasta 30 mil personas al mes de estos cuatro países, que tengan un patrocinador que reúna los requisitos y superen las investigaciones de antecedentes, podrán venir a Estados Unidos por un periodo de dos años, con autorización para trabajar”, detalló en la Casa Blanca.
A pesar de ello, programas como el Título 42 -que expulsa a migrantes sin que medie alguna Corte o juicio- siguen vigentes, lo que ha sido una demanda constante de organismos de derechos humanos, pues aseguran que la mayoría de las personas que sí necesitan el beneficio, no reúnen los requisitos.
De acuerdo con la Oficina de Aduanas y Protección Fronteriza (CBP) estadounidense, durante el año fiscal 2022 (octubre del 2021-septiembre del 2022) se detuvo a dos millones 378 mil 944 personas, y en el arranque del año fiscal 2023 ya suman 465 mil 034 capturas.
En este contexto, el embajador Ken Salazar sostuvo que “sin seguridad no hay prosperidad” y por ello están de acuerdo en trabajar ambos países “para lograr una seguridad mejor; por eso las prioridades son el combate al fentanilo, el tráfico de personas y en contra de cárteles que secuestran migrantes, así como el combate al tráfico de armas”, pues son temas cruciales en ambos países.
En este sentido, dijo que trabajan para construir una América más fuerte, donde puedan ser reconocidos todos, ya que el presidente Joe Biden es el único que ha volteado hacia el sur desde el inicio de su administración.
DGM