Quería su oficina paralela, responde la diplomática

El desencuentro entre el secretario de Relaciones Exteriores, Marcelo Ebrard, y la exembajadora de México en Estados Unidos, Martha Bárcena, se originó desde el momento mismo en que el Presidente Andrés Manuel López Obrador la nombró representante de nuestro país ante el gobierno de Washington, aseguró en entrevista con La Razón la propia diplomática.

Luego de que el canciller dijo que “nunca le tuvo confianza”, Bárcena Coqui afirmó que fue mutuo, pero que mientras tuviera la del Presidente, para ella era más que suficiente.

“Yo creo que no existió (la confianza), desde el principio, porque Ebrard trató de bloquear mi nombramiento y estuvo en contra, él quería abrir una oficina paralela con un señor que ahora opera su campaña en el Partido Verde. Querían abrir una oficina paralela a la embajada, todavía peor, para el señor Ebrard hacer sus enjuagues de manera digamos, simultánea y paralela al trabajo de la embajada, rompiendo toda la institucionalidad del gobierno”, señaló.

El personaje que mencionó la exembajadora es Javier López Casarín, diputado federal del Partido Verde, quien recibió un pasaporte diplomático al inicio del sexenio, a pesar de no formar parte del Servicio Exterior Mexicano.

Martha Bárcena insistió en que el canciller “negoció” con el secretario de Estado de Estados Unidos, Mike Pompeo, que México fuera receptor de los migrantes expulsados por la administración de Donald Trump, lo que se conoció como Quédate en México, pero “ahora está preocupado porque este tema pudiera interferir con sus aspiraciones políticas”.

“Yo veo detrás de esto una posibilidad de intento de distracción de los medios de comunicación por las otras noticias que están llegando desde Nueva York, eso puede ser una explicación. La otra explicación es que evidentemente el señor Ebrard está preocupado por todos aquellos temas que puedan afectar sus aspiraciones presidenciales, que se vea lo que hizo, que llegó a un acuerdo con Pompeo que no era favorable para los derechos humanos de los solicitantes de asilo y de los migrantes y que iba en contra de la tradición mexicana de protección a migrantes”, aseveró.

La exembajadora reiteró que las acusaciones contra Marcelo Ebrard las realizó Mike Pompeo y ella confirmó ésta, basada en el libro del exfuncionario.

“Pues están las memorias de Pompeo y el libro Guerras en la Frontera que dice clarísimo cómo está”, señaló Bárcena.

Sobre su relación con el Presidente López Obrador, Bárcena rechazó que pudiera haber rencores o resentimientos contra el mandatario.

“Yo no considero por mi parte que esté rota nada. Yo repito, sigo teniendo respeto y gratitud al Presidente de México y cariño al esposo de Beatriz Gutiérrez, la sobrina de mi esposo, punto”, señaló la exembajadora de México ante el país vecino.