Tras los hechos en Matamoros

“Narcocarta” no calma a familia de secuestrados

Padres de las víctimas expresan que la presunta disculpa del grupo armado sirve de poco; advierten que nada cambiará su dolor

Familiares de los estadounidenses que fueron secuestrados en México, el pasado miércoles.
Familiares de los estadounidenses que fueron secuestrados en México, el pasado miércoles. Foto: AP

Familiares de estadounidenses secuestrados en México dijeron que una supuesta disculpa del cártel mexicano al que se le atribuye el ataque ha servido de poco para aliviar el dolor causado por la agresión hacia sus seres queridos, quienes al final resultaron asesinados o heridos.

En la carta, el grupo Los Escorpiones del Cártel del Golfo se disculpó con la población de Matamoros —donde los cuatro estadounidenses fueron secuestrados—, con la mujer mexicana que murió en el incidente y con los estadounidenses atacados y sus familias.

El padre de Shaeed Woodard, uno de los dos estadounidenses que murieron, se dijo sorprendido de que el cártel haya ofrecido disculpas por el violento secuestro registrado en un video que rápidamente se viralizó en línea.

“He estado tratando de encontrarle sentido durante toda una semana. Simplemente, estuve inquieto. No podía dormir, no podía comer. Es una locura ver que te quiten a tu propio hijo de esa manera, de una manera violenta como esa. No se lo merecía”, expresó James Woodard a los periodistas el jueves al hablar sobre la muerte de su hijo.

El primo de Eric Williams, que durante el secuestro recibió un disparo en la pierna izquierda, dijo que su familia se siente “muy bien” sabiendo que está vivo, pero no acepta ninguna disculpa del cártel.

“No va a cambiar nada sobre el sufrimiento por el que pasamos”, afirmó Jerry Wallace, de 62 años, quien pidió a los gobiernos de Estados Unidos y México que aborden mejor la violencia de los cárteles.La carta atribuida al cártel condenaba la violencia y decía que entregó a las autoridades a sus propios integrantes responsables.

“Hemos decidido entregar a los involucrados y responsables directos en los hechos, quienes en todo momento actuaron bajo su propia decisión e indisciplina”, se lee en la carta, que agrega que esos individuos habían ido en contra de las reglas del cártel, que incluyen respetar “la vida e integridad de los inocentes”.