"El Chueco" llegó a un domicilio en Urique buscando a dos personas con quienes había tenido problemas luego de haberle ganado un juego de béisbol. El entonces fiscal de Chihuahua, Roberto Javier Fierro Duarte, informó que José Noriel Portillo entró a esta casa, disparó contra Paul B. y secuestró a su hermano Armando B. Luego, prendió fuego a dos viviendas.
Así actuaba "El Chueco", un hombre nacido en mayo de 1992 y que no sólo fue señalado como responsable del asesinato de dos sacerdotes jesuitas en Cerocahui, en la Sierra Tarahumara, hace nueve meses; también era uno de los criminales más peligrosos en el estado, quien incluso llegó a liderar el grupo delictivo "Gente Nueva", operativo del Cártel de Sinaloa, de acuerdo a medios como Infobae.
No era cualquier hombre y, como tal, "El Chueco" no estaba alejado del modo de vida que tienen muchos de los narcotraficantes en México. Su mansión, ubicada en Chihuahua, llegó a ser exhibida luego de asesinar a los dos sacerdotes jesuitas y reflejaba el lujo al que están acostumbrados a vivir este tipo de personajes en nuestro país.
El contraste de Bahuichivo
La cascada de Huicochi, los viñedos en el hotel Misión, el mirador Cerro de los Gallegos, son parte de los atractivos turísticos de Bahuichivo y Cerocahui y son también parte de los lugares que dominaba "El Chueco". Precisamente en Bahuichivo es en donde se encuentra ubicada la mansión que habitaba este hombre encontrado sin vida en Sinaloa.
Su casa, de acuerdo a medios como Debate o El Heraldo de México, tenía acabados finos de madera en su interior, mientras que en el exterior se caracterizaba por su arquitectura "gringa", es decir, por parecerse a las casas construidas en Estados Unidos, con grandes ventanales y techos altos.
Al exterior contaba con una gran área con pasto sintético y, justo enfrente de la mansión, se había construido una zona llamada "fortaleza", en donde presuntamente vivían sicarios que tenían a su cargo el cuidado de "El Chueco". La casa contrastaba completamente con las viviendas que se encontraban alrededor, las cuales tenían una estructura mucho más humilde.
La Santa Muerte
Al interior de la mansión no sólo destacan los acabados de lujo, sino también el altar a la Santa Muerte, colocado en un área especial en la casa. Se contaba también con halcones para vigilarlo todo el tiempo, sobre todo para saber su ubicación en caso de ser víctima de alguna emboscada.
Troneras para atacar con facilidad
Según los medios citados, la mansión también contaba con "troneras", un tipo de aspillera o abertura practicada en una muralla desde donde se disparan misiles, esto en arquitectura militar.
Esta mañana en conferencia de prensa, el presidente Andrés Manuel López Obrador confirmó que el cuerpo sin vida encontrado en Choix, Sinaloa, corresponde al de José Noriel Portillo, alias "El Chueco", responsable del asesinato de dos sacerdotes jesuitas en Cerocahui, Chihuahua.
