México demandó fortalecer los marcos internacionales para control y tráfico de desvío de armas, señaló Juan Ramón de la Fuente, embajador permanente de México ante las Naciones Unidas.
“Para México es especialmente importante que el Consejo de Seguridad continúe analizando seriamente las consecuencias negativas del tráfico y desvío de armas, especialmente cuando son resultado de violaciones directas de embargos y acuerdos vinculantes”, manifestó el embajador mexicano al participar en la reunión permanente del Consejo de Seguridad, realizada en Nueva York.
Juan Ramón de la Fuente recordó que en el 2021 México presentó una propuesta que se convirtió en la resolución 2616, pero en la práctica no se ha instrumentado correctamente.
“Hace especial énfasis en el respeto a embargos de armas impuestas por el Consejo, violar estos embargos implica que más armas estén disponibles en diversas situaciones y que en consecuencia aumente el sufrimiento de la población civil. Contiene disposiciones sobre la necesidad de construir capacidades y brindar asistencia, pero igualmente promueve acciones de mayor colaboración entre los estados, incluida la cooperación regional por tierra, mar y aire.
“Se apoyan y refuerzan marcos de referencia que son comunes, tales como el programa de acción para prevenir, combatir y erradicar el tráfico ilícito de armas pequeñas y ligeras en todos sus aspectos y otras iniciativas y estrategias o planes de acción a nivel regional”, explicó el diplomático mexicano.
Agregó que los embargos establecidos por el Consejo de Seguridad “constantemente” son violados por algunos países, por lo que se pronunció por un mayor compromiso de los Estados, marcadamente aquellos que son productores, y dejar de lado los intereses geopolíticos o empresariales.