En marzo del 2023, el 62.1 por ciento de la población mexicana mayor de 18 años consideró vivir insegura en su ciudad, de acuerdo con la Encuesta Nacional de Seguridad Pública Urbana (ENSU) del Inegi, y las ciudades con mayor porcentaje de población que se consideraron inseguras por sus habitantes son Fresnillo (96 por ciento), Zacatecas (94.3 por ciento) y Naucalpan de Juárez (88 por ciento).
Respecto a la encuesta realizada en diciembre del 2022, Fresnillo bajó en su percepción de inseguridad 1.7 puntos y Naucalpan lo hizo 1.7, mientras que Zacatecas aumentó un punto.
Por el contrario, las ciudades donde la percepción de inseguridad resultó menor fueron San Pedro Garza García (18.3 por ciento), Benito Juárez (19.4 por ciento), Piedras Negras (19.9 por ciento), Los Cabos (22.7 por ciento), Saltillo (23.9 por ciento) y Tampico (24.1 por ciento).
Los espacios públicos en donde la población mexicana percibió mayor inseguridad son el cajero automático en la vía pública (72.9 por ciento), transporte público (65.2 por ciento), banco (55.9 por ciento) y las calles que habitualmente usa (54.4 por ciento).
Otros espacios que se consideran inseguros son la carretera, mercado, parque recreativo, centro comercial, automóvil, trabajo, casa y escuela en menor medida.
En el tema de las carreteras, la percepción de inseguridad en marzo del 2023 es la más alta registrada (49.7) desde septiembre del 2021, cuando fue de 49.8 por ciento. Antes, en marzo del 2021, contabilizó 50.5 puntos porcentuales. Apenas en la encuesta de diciembre del 2020 se registró 48.5, un aumento en este año de 1.2 puntos.
El resultado de la encuesta presentada ayer establece que el 51.4 por ciento de la población de 18 años y más manifestó evitar llevar cosas de valor, como joyas, dinero o tarjetas de crédito, por temor a sufrir algún delito, mientras que el 44.6 por ciento dijo ya no caminar por los alrededores de su vivienda después de las ocho de la noche, mientras que el 43.6 por ciento reconoció haber hecho cambios en cuanto a permitir que sus hijos menores salgan de su vivienda.
El porcentaje que respondió haber modificado rutinas relacionadas con visitar parientes o amigos fue 27.9 por ciento.
En este sentido, el 34.7 por ciento de la población de 18 años y más que reside en las ciudades de interés, consideró que, en los próximos 12 meses, la situación de la delincuencia e inseguridad en su ciudad seguirá igual de mal, mientras que el 22.1 por ciento señaló que puede ser peor.
Lo anterior representa un descenso estadísticamente significativo de 3.8 puntos porcentuales con relación a diciembre del 2022 y de 2.9 en comparación con marzo del 2022, cuando se reportó 25.9 y 25.0 por ciento, respectivamente, en la percepción.
Las conductas que la gente aseguró haber escuchado en las zonas en donde vive son el consumo de alcohol, robos o asaltos, vandalismo en viviendas o negocios, venta o consumo de drogas, disparos frecuentes con armas, bandas violentas o pandillerismo, tomas irregulares de luz y robo o venta ilegal de combustibles.
Con Indira, la tortura se dispara en Colima
Durante el 2022, primer ejercicio fiscal completo de la administración de la gobernadora Indira Vizcaíno en Colima, los casos de tortura se dispararon 60.8 por ciento con relación al 2021.
De acuerdo con el Informe de Actividades 2022 de la Comisión de Derechos Humanos de Colima (CDHC), durante el año anterior se recibieron 37 quejas por tortura cometida por distintas autoridades estatales, mientras que en el 2021 la cifra fue de 23.
Adicionalmente, del documento se desprende que durante el 2022 se registró un alza importante en la incidencia de la violación de varios derechos humanos en la entidad.
En violación al derecho a la integridad y seguridad personal el aumento fue de 109.4 por ciento, debido a que los casos pasaron de 85 en el 2021 a 178 en el 2022.
En el derecho a la seguridad jurídica el incremento fue de 941.1 por ciento, pues los casos pasaron de 17 a 117 entre un año y el otro.
Además, los reportes por violación a los derechos de las niñas, niños y adolescentes tuvieron un repunte de 127.2 por ciento, debido a que los casos pasaron de 33 a 75 entre un año y otro.
Las quejas por violaciones al debido proceso tuvieron un incremento de 550 por ciento, ya que el número de ellas pasó de 18 en el 2021 a 117 en el 2022.
De igual forma, el derecho al acceso a la justicia presentó alza de 40 por ciento, ya que los expedientes pasaron de 55 en el 2021 a 77 en el ejercicio siguiente.
En cuanto a las autoridades señaladas como responsables, la Fiscalía General de Justicia del Estado de Colima concentra el 43 por ciento de las denuncias recibidas en el año.
Sin embargo, la dependencia que presenta mayor incremento entre un año y otro es el Sistema Penitenciario, con cuatro mil por ciento, ya que en el 2021 no hubo ninguna queja originada en esta área, pero en el 2022 se recibieron 40.
En segundo lugar se ubicó la Secretaría de Educación estatal con aumento del 50 por ciento en la incidencia, ya que las denuncias pasaron de 24 a 36 entre un año y otro.
Los municipios en donde se originó la mayor cantidad de quejas por violaciones a los derechos humanos fueron Villa de Álvarez, Manzanillo, Coquimatlán y Comala, con 125 casos repartidos entre dependencias de los cinco.
El Ayuntamiento de Villa de Álvarez fue en donde se presentó el mayor incremento en la incidencia, con 53.8 por ciento, ya que en el 2021 se generaron 26 quejas en alguna de sus dependencias, cifra que llegó a 40 en el 2022.
Entre los organismos municipales más denunciados el año pasado están el DIF de Comala, el DIF de Manzanillo, la Comisión de Agua Potable y Alcantarillado de Manzanillo, el DIF de Colima capital y la Comisión de Agua Potable y Alcantarillado de Comala.
En Tláhuac, Iztacalco y Milpa Alta sienten más inseguridad
Durante el primer trimestre del 2023, los habitantes de las alcaldías Milpa Alta, Tláhuac e Iztacalco —todas encabezadas por morenistas— dijeron sentirse más inseguros que durante el mismo periodo del año pasado.
Estos datos contrastan con lo que ocurrió en el resto de la capital, ya que en 13 de las 16 demarcaciones territoriales la población percibió menos inseguridad en el lapso citado, de acuerdo con la más reciente entrega Encuesta Nacional de Seguridad Urbana (ENSU) realizada por el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi).
La alcaldía Tláhuac, encabezada por Berenice Hernández Calderón, fue la demarcación que presentó el porcentaje más alto de población de 18 años o más que dijo sentirse insegura de toda la capital, con un 73.9 por ciento.
Este indicador es 2.5 puntos porcentuales más elevado que la cifra del primer trimestre del 2022, cuando 71.4 por ciento de los habitantes del lugar dijeron sentirse inseguros.
En el caso de Iztacalco, encabezada por el alcalde morenista Armando Quintero Martínez, durante el primer trimestre del año en curso, 70.1 por ciento de sus habitantes mayores de edad refirió sentirse inseguro, esto es, 1.9 puntos porcentuales más que durante el mismo lapso del año pasado.
Esta alcaldía también se ubicó —con 72.2 por ciento— en la tercera posición a nivel nacional en cuanto a porcentaje de población que entre enero y marzo pasado presenció o escuchó acerca de robos o asaltos en los alrededores de su vivienda, sólo debajo de dos municipios del Estado de México.
Además, de acuerdo con esta encuesta, Iztacalco presentó el porcentaje más alto de población que en el lapso estudiado presenció o escuchó sobre venta o consumo de drogas en los alrededores de su lugar de vivienda, de entre todas las ciudades que fueron estudiadas, con 75.2 por ciento.
En tanto, Milpa Alta, gobernada por Judith Vanegas Tapia, fue la alcaldía que presentó el mayor aumento de las tres mencionadas, toda vez que mientras en el primer trimestre del 2022, 50.8 por ciento de su población adulta dijo sentirse insegura en esta demarcación, para el mismo lapso de este año, la cifra pasó a 59 por ciento, esto es 8.2 puntos porcentuales más que hace un año.
En contraste, en el resto de las alcaldías capitalinas, el porcentaje de habitantes que refirieron sentirse inseguros en la ciudad que habitan disminuyó en el último año, incluso en demarcaciones históricamente afectadas por la violencia y constantes hechos delictivos, como Iztapalapa y Cuauhtémoc, que son también las alcaldías con mayor población.
En Iztapalapa, el porcentaje de población que se sintió insegura disminuyó en 7.3 puntos, al pasar del 77.8 por ciento en 2022 a 70.5 por ciento de los ciudadanos para marzo de este año.
Mientras que en la Cuauhtémoc, el porcentaje de percepción de inseguridad disminuyó de 64.9 por ciento en enero-marzo del 2022 a 58.5 por ciento en el mismo periodo de este 2023.
La alcaldía con menor percepción fue Benito Juárez, con 19.4 por ciento.