Aunque es considerada cruel e inhumana en algunos lugares del mundo, aquellos en donde se aplican -refieren los expertos- han reducido considerablemente las estadísticas de delitos contra mujeres y niños, específicamente las violaciones. Esta semana se dio a conocer que en San Luis Potosí se lanzó una iniciativa en conjunto con el PVEM y el PT para aplicarla a aquellos que cometan esta agresión.
La propuesta surge alrededor del mundo de manera periódica, sin embargo, siempre provoca el debate alrededor de dos puntos: ¿es cruel e inhumana? ¿En verdad reduce las violaciones? Mientras la conversación sigue, es necesario que sepas qué es la castración química y en cuáles países se aplica.
¿Qué es la castración química?
La castración química es un proceso médico que se apunta directamente en contra de violadores, agresores sexuales o pederastas, con el fin de que eviten reincidir y que la sociedad sepa que este castigo se aplicará -en los países en los que está permitido- a aquellos que cometan este delito en contra de las mujeres.
Lo que hace la castración química es reducir la líbido y la actividad sexual del agresor luego de suministrarle una serie de medicamentos destinados a este procedimiento. Los medicamentos sofocan la conducta sexual del agresor a través de los niveles de testosterona.
Aunque tiene efectos reversibles, la medida sigue siendo polémica pues varias asociaciones de Derechos Humanos refieren que es una práctica cruel e inhumana.
¿En cuáles países se aplica la castración química?
En Europa, Polonia fue el primer país en introducir en su Código Penal a la castración química forzosa, por lo menos, aplicada para los pederastas, allá por el año 2009. También se aplica en Estonia, Moldavia Rusia, aunque en muchos de ellos se aplica únicamente en casos en donde la violación se cometa en menores de 14 años.
Corea del Sur es otro de los países en donde se aplica y fue polémica cuando en el año 2013, la Corte de Seúl condenó a un hombre de 31 años que fue acusado de pederastia a 15 años de cárcel y a otros tres años de castración química con un tratamiento hormonal.
En Estados Unidos, por ejemplo, algunos de los estados que legislan sobre medidas penitenciarias son Florida, Georgia, Iowa, Luisiana, Oregon, Texas y Wisconsin.
El caso particular de España
Aunque la castración química no esté aprobada en España, el ordenamiento penitenciario permite que se aplique de forma voluntaria para el preso que así lo solicite. Sí, es el mismo reo el que tiene que solicitar el procedimiento médico.
Uno de los primeros casos fue el de un reo conocido como el violador del Eixample, quien se sometió a la castración química meses antes de ser puesto en libertad, en el año 2013, luego de cumplir sus condenas. Muchos de los presos que solicitan esta medida lo hacen para no reincidir, a sabiendas que pueden volver a cometer este delito.
¿Cómo está la situación en México?
En México aún no se aplica, sin embargo, en muchos estados se han presentado iniciativas para que se aplique a los violadores, especialmente contra pederastas, sobre todo por el alto nivel de abusos en contra de menores.
