Las memorias sobre cómo increpó al expresidente Ernesto Zedillo y la particular oratoria para defender sus posturas desde el PRI, PRD y Morena desde el gabinete y el Poder Legislativo despidieron esta tarde a Porfirio Muñoz Ledo en el Salón de Sesiones de la Cámara de Diputados, donde legisladores de los diversos partidos existentes exaltaron su labor por la democracia del país.
Su féretro se abrió paso entre los primeros aplausos que se desprendieron en las escalinatas del Frontispicio del Palacio Legislativo de San Lázaro, donde minutos después más de una veintena de adjetivos lo destacaron como una persona sin la que no se comprendería la transición política, “imprescindible de la democracia”, “astuto orador”, “político ingenioso”, “estadista”, “constructor de una república”, pero también “un gran bailarín”.
En el Salón de Sesiones, donde se desempeñó tres legislaturas como diputado y dos de ellas como presidente de la Mesa Directiva, lo recibió una Comisión de Cortesía conformada por los diputados Karla Yuritzi Almazán, de Morena; Juan Carlos Romero Hicks, del PAN; Javier Casique, del PRI; María del Carmen Pinete, del PVEM; Magdalena Núñez, del PT; Amalia Dolores García, de MC y Gabriela Sodi, del PRD.
El presidente de la Comisión de Decanos, Augusto Gómez Villanueva, rompió el protocolo para hablar desde su curul y revelar la última voluntad del fundador del PRD y Morena: que su óleo sea integrado en el salón de Presidentes del Comité Ejecutivo Nacional del PRI.
“No estamos rindiendo honor al cuerpo de Porfirio Muñoz, estamos rindiendo homenaje a su voz y como la voz de una generación que se puede transformar en el reclamo por la libertad y el uso de la razón y la inteligencia para continuar la construcción de las instituciones democráticas…
En la palabra, desde la tribuna, lo secundó la perredista Gabriela Sodi, quien lo destacó como la persona que quitó el control electoral al gobierno y criticó prácticas antidemocráticas y hegemónicas.
La emecista Amalia García lo recordó junto a Cuauhtémoc Cárdenas, Ifigenia Martínez y Rodolfo González Guevara para fundar al PRD tras renunciar al PRI.
A nombre del PRI, la regiomontana Marcela Guerra lo destacó por su paso en secretarías como la de Educación, del Trabajo, la representación de México ante la ONU y la Unión Europea y los partidos de los que formó parte.
La diputada resaltó los pasos dados por Muñoz Ledo para tener una nueva democracia y por resolver conflictos, tejer soluciones que hoy deja, mencionó, como su “legado libertario” para que la autoridad política se ejerza dentro de la pluralidad.
El último mensaje fue del presidente de la Mesa Directiva, el panista Santiago Creel, quien lo calificó como un “hombre insigne y adelantado a su tiempo”, de quien permanecerán sus reformas y decisiones para “afianzar nuestra República”.
“A riesgo de errar: el legado más importante que deja Porfirio Muñoz Ledo a la República y al pueblo de México es el impulso que le imprimió a la transición democrática y a la construcción de instituciones”, concluyó.
Proponen medalla Belisario Domínguez post mortem
El senador Alejandro Rojas Díaz Durán propondrá que se le otorgue la medalla Belisario Domínguez, de manera post mortem, a Porfirio Muñoz Ledo, por su trayectoria política y sus aportes a la vida democrática del país.
El morenista indicó que presentará la propuesta ante el pleno para que sea turnada a la Comisión de la Medalla Belisario Domínguez para su dictaminación.
“Propondré a mis compañeras y compañeros senadores de todos los grupos parlamentarios para que el Senado de la República le otorgue la medalla Belisario Domínguez post mortem a Porfirio Alejandro Muñoz Ledo y Lazo de la Vega, por su trascendente contribución a la transición democrática de México, constructor de instituciones públicas y promotor de una profunda democracia del Estado mexicano”, declaró.
Luego de que Muñoz Ledo falleció este domingo a los 89 años, Rojas Díaz Durán enfatizó que amerita que se le otorgue este reconocimiento.
“Su extraordinario legado ideológico, político, académico, cultural, intelectual, diplomático es una fuente inagotable de conocimiento y sabiduría política sobre este hombre de Estado”, indicó.
Recordó que la presea ya se ha entregado post mortem a personajes como el rector de la UNAM Javier Barros Sierra, a Luis H. Álvarez y Carlos Castillo Peraza.
Con información de Magali Juárez
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