El presidente Andrés Manuel López Obrador anunció la intención de su gobierno de comprar nueve hospitales del IMSS, ISSSTE y la Secretaría de Salud que fueron contratados a empresas privadas para su construcción, durante los dos sexenios anteriores, por un monto superior a 93.8 mil millones de pesos.
"¿Qué les estamos proponiendo? Vamos a hacer un avalúo y te compramos el hospital", explicó en la conferencia matutina tras aclarar que para la operación "hay un procedimiento legal que tiene que ver con un avalúo. Ya se ha hablado con algunos y han aceptado", comentó este jueves 13 de julio.
De acuerdo con la información presentada en la mañanera, son dos hospitales del Instituto Mexicano del Seguro Social, tres de Salud y cuatro del Instituto de Seguridad y Servicios Sociales para Trabajadores al Servicio del Estado.
Contratos fueron entregados por plazos de entre 23 y 25 años
Los contratos fueron entregados durante las administraciones de Felipe Calderón y Enrique Peña Nieto por plazos de entre 23 y 25 años, por los que el Gobierno deberá pagar 93 mil 817 millones de pesos para cumplir con los términos de Asociación Público-Privada (APP) y Proyecto de Prestación de Servicios (PPS).
Se trata de los hospitales generales del IMSS en Tapachula, Chiapas, y Bahía de Banderas, Nayarit; de Alta Especialidad de la Secretaría de Salud en Ciudad Victoria, Tamaulipas, León, Guanajuato, e Ixtapaluca, Estado de México.
Además de la clínica hospital del ISSSTE en Mérida, Yucatán, y los hospitales generales del instituto en Tepic, Nayarit, y la Ciudad de México, así como la sustitución del General en Villahermosa, Tabasco.
Beneficiarios de contratos son del bloque opositor
En la mañanera, el presidente López Obrador acusó que los beneficiarios de esos contratos conforman parte del bloque opositor, pues están enojados porque se acabarán los negocios millonarios que mantenían con los anteriores gobiernos.
"Esta es una parte de por qué la campaña en contra en los medios. Porque en esto, y en otros contratos de este tipo, están metidos los de la llamada, para no particularizar, clase política, o sea, los del convoy. Los de arriba, puro influyentismo", afirmó.
El presidente expuso que por dicha razón prefirió negociar y comprar los hospitales, aunque reconoció que "suspender el contrato, juicio, como está el Poder Judicial, nos cepillan. Perdemos porque los que tienen estos contratos son de los que mandan en el Poder Judicial, son de los reductos que han quedado del antiguo régimen conservador y corrupto”.
Recordó que todavía hay algunos políticos metidos en la venta de medicinas y de equipos médicos porque era un negocio jugoso, pero ya están viéndose menguados.
DAN