Bien lo dicen los especialistas de la Universidad Nacional Autónoma de México: aunque durante todo el año, tiemble mucho en México, nuestra percepción de que en septiembre hay una mayor actividad sísmica en el país, es por lo mucho que nos marcaron los terremotos de 1985 y 2017. Indican que, incluso, ese par de sismos, han provocado que se olviden otros más que han sucedido y que también han quedado en la historia de nuestra nación.
El sismo del Ángel es uno de esos temblores de gran magnitud que ocurrió en 1957 y del que poco se habla, precisamente a causa de lo que los especialistas unamitas comentan: se queda en la memoria colectiva, aquel que causó más daño.
¿Cuándo ocurrió el sismo del Ángel y qué pasó ese día?
El domingo 28 de julio de 1957, durante la madrugada, a las 02:40 horas, se registró un sismo de magnitud 7.8 al sureste de Acapulco, Guerrero, a 341 kilómetros de la Ciudad de México. La afectación más importante de ese sismo fue la ocurrida al Ángel de la Independencia, en Paseo de la Reforma.
La escultura de siete metros de altura y siete toneladas de peso cayó tras el sismo, sin que se registraran víctimas mortales por este acontecimiento, uno de los que pocos se habla cuando se toca de los sismos en México.
El sismo del Ángel lleva su nombre justo por la caída del Ángel de la Independencia, cuya figura se restauró y después de 14 meses de reparaciones y reforzamientos del monumento, éste fue restaurado y reinaugurado en el año de 1958. Luego de varios sismos, incluidos los de 1985 y 2017, el Ángel de la Independencia sigue intacto.
¿Cuáles otros daños se registraron tras el sismo del Ángel?
Quizá la zona más afectada en la Ciudad de México fue la entonces delegación Cuauhtémoc. En la capital se reportó el fallecimiento de 39 personas, aunque a nivel nacional se reporta que murieron 160 personas, de acuerdo a fuentes periodísticas de la época, además de mil edificios que reportaron algún tipo de daño, caída de bardas, grietas en estructuras y algunos acabados.
San Marcos, Chilpancingo, Chilapa, Huamuxtitlan, Ayutla y Tuxtla, en Guerrero, fueron de las poblaciones más afectadas además del entonces llamado Distrito Federal. Los daños económicos se calcularon en 25 millones de dólares.
