Creció su presencia igual que otros insectos, dicen

Crece presencia de chinches, pero también... de paranoia

Expertos niegan riesgo de enfermedades por este animal que ha causado cierre de escuelas; están más visibles por cambio climático, dicen; alertan peligro para polinizadores

Ven en chinches más paranoia que riesgo real
Ven en chinches más paranoia que riesgo real Foto: Especial

Ante las especulaciones que han surgido desde que comenzaron a circular en redes sociales videos de chinches, especialistas señalan que, efectivamente, hay un aumento en la presencia del insecto, pero también de otros, como hormigas y mosquitos, y esto puede estar asociado al cambio climático, aunque también a factores de desplazamiento de la población.

Incluso, entre las teorías que plantean los expertos, están las secuelas de la pandemia como causa de la mayor presencia de los insectos, pero también reconocen que hay una suerte de paranoia colectiva que puede deberse al miedo que produce en las personas la idea de volver a otra emergencia sanitaria, más allá de una “conspiración gubernamental” o de que las picaduras no significan riesgos para la salud.

Desde que hace unos días se dio a conocer su presencia en el metro de la Ciudad de México, en centros comerciales y en planteles de enseñanza superior, hasta este jueves, al menos 17 escuelas y facultades de la UNAM, IPN y la UACM habían suspendido actividades para fumigar.

Considero que es un poquito de paranoia y de pánico de que volvamos a tener otra pandemia. Realmente estamos apenas empezando a salir de la del Covid-19 y la gente la verdad tenemos miedo de que vuelva a suceder
Gabriela Jiménez, Bióloga del Instituto de Ecología de la UNAM

Para Tonatiuh Vega, entomólogo médico salubrista, la situación podría ser una consecuencia del Covid-19.

“Todos pasamos (en la pandemia) mucho tiempo fuera de los espacios comunes. Las chinches tienen un estilo de vida críptico, lo que quiere decir que pasan la mayoría del tiempo escondiéndose en grietas y rajaduras donde no son vistas ni perturbadas; sin embargo, se hacen activas en la noche”, destacó.

Con el Covid, dijo, muchos espacios estuvieron abandonados y volver a ocuparlos hizo que también los insectos proliferen. Comentó que la presencia de las chinches, que se alimentan de sangre humana y de animales, está en aumento por diversas causas que tienen que ver con la movilidad de las personas y con el cambio climático, al aumentar la temperatura y ser propicia para su actividad.

Gráfico
Gráfico ı Foto: larazondemexico

También se refirió a los estigmas que hay en estos casos, en los que se cree que este insecto está asociado a la falta de higiene, y alertó que el problema puede crecer.

“Cada vez son más las solicitudes que llegan con nosotros para atender este fenómeno, pero es como parte de un secreto; debemos quitarnos esa pena y de inmediato alertar. Desconozco si el Gobierno ya ha pensado en alguna estrategia, porque de seguir esta situación, puede crecer”, dijo.

En otra arista de este fenómeno, Gabriela Jiménez, bióloga del Instituto de Ecología de la UNAM, estimó que la plaga de chinches resulta alarmante para la sociedad porque las personas tienen miedo de otra pandemia y esta situación sólo se trata de “paranoia” colectiva.

Las chinches están generando psicosis y ansiedad, hay gente que no ha tenido si quiera contacto con esos insectos y presentan ronchas, así de poderoso es el sistema social y el impacto mediático
Mayte Fierro, Socióloga de la UAM Iztapalapa

“Yo sí considero que es un poquito de paranoia y de pánico de que volvamos a tener otra pandemia. Realmente estamos apenas empezando a salir de la del Covid-19 y la gente la verdad tenemos miedo de que vuelva a suceder”, manifestó.

Mencionó que los casos de chinches que han reportado estudiantes de la UNAM no han sido confirmados y es muy difícil que estos seres vivos se encuentren dentro de las aulas.

“Son animales nocturnos; entonces, dudo que se hayan visto en el Metro y que se hayan instalado en las aulas de la UNAM”, comentó, tras señalar que si las chinches se hospedan en sitios para ocultarse, es poco probable que dentro de un aula encuentren un lugar adecuado y posteriormente salgan a alimentarse en la noche.

También destacó el efecto que puedan ocasionar las fumigaciones en las escuelas. Apuntó que esto puede repercutir de manera negativa en la fauna polinizadora que se encuentra en las instituciones e incluso en los propios estudiantes.

“Se puede crear resistencia en otros insectos; también puede matar insectos que sean más sensibles a esas sustancias, y que nos va a perjudicar, léase abejas, mariposas y abejorros, que son grandes polinizadores, y nadie está pensando que al arrasar con las chinches con un insecticida le va a llegar a los polinizadores también”, advirtió.

Mayte Fierro, socióloga de la UAM Iztapalapa, coincidió en que esto “está generando psicosis en la población”, ya que este tipo de fenómenos “siempre crean incertidumbre. Está pasando como con el Covid: la gente hablaba de un tema conspiranoico; eso deja vulnerable a la población porque no saben qué nuevo peligro pueda enfrentar la humanidad.

“Se ha hablado de nuevas pandemias a nivel social; las chinches están generando psicosis y ansiedad, hay gente que no ha tenido si quiera contacto con esos insectos y presentan ronchas, así de poderoso es el sistema social y el impacto mediático, sobre todo después de un estrés como el vivido por el Covid”, dijo a La Razón.