El Presidente Andrés Manuel López Obrador reconoció que la ministra presidenta de la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN), Norma Piña, fue sometida a fuertes presiones, pues tenía la buena intención de devolver los 15 mil millones de pesos de los fideicomisos del Poder Judicial, que se destinarían a las personas afectadas tras el paso del huracán Otis.
Reiteró que no hay avances en la propuesta de Piña Hernández de reintegrar dichos recursos económicos a la Tesorería de la Federación, pues en eso se llevaba a cabo el diálogo entre los poderes Ejecutivo y Judicial, cuando viene una “tormenta” de amparos que detuvieron todas las negociaciones.
“Siento que había de parte de la presidenta la intención, no creo que sea un truco que tengan bien ensayado, sino que ella quiso hacer algo, buscar una salida, entregar estos recursos para los damnificados; sin embargo, está rodeada, ése es el problema de la autoridad que no es libre, que depende de grupos de intereses creados.
“Me imagino que empezaron a hablar por teléfono para decirle ‘¿qué hiciste?’, y la sometieron a fuertes presiones y la hicieron cambiar de parecer, porque no creo que ella haya escrito esto y al mismo tiempo haya dado la orden o haya indicado a jueces, ‘yo voy a hacer esto, pero ustedes promuevan amparos’”, añadió.
El mandatario adelantó que esperará a ver qué sucede con los amparos, aunque desconfía del resultado, ya que los mismos mandos en el Poder Judicial serán quienes los resuelvan.
Después de exhibir y dar lectura al oficio que le dirigió la ministra Norma Piña en octubre, comentó que “además no se afectan derechos laborales porque está autorizado el presupuesto de este año y ahí vienen los sueldos y prestaciones de los trabajadores”.
