La prisión domiciliaria a Emilio Lozoya, exdirector de Petróleos Mexicanos (Pemex), fue negada en las primeras horas de hoy, el juez determinó mantener la prisión preventiva.
En el Reclusorio Norte se realizó una audiencia solicitada por la defensa del exfuncionario, en la que solicitaron el cambio de prisión preventiva, pues ya ha pasado dos años en prisión sin que se le dicte sentencia y ha cumplido con todos los procedimientos que se establecen en un juicio en el caso Odebrecht.
El abogado, Miguel Ontiveros, afirmó que no están solicitando nada ilegal en el juicio que se instruye, pues constitucionalmente está establecido que cuando no se dicte sentencia en el plazo de dos años, el inculpado puede solicitar que sea puesto en libertad para enfrentar en esa condición su proceso penal.
La defensa de Lozoya solicitó la libertad de su cliente, y reconoce que se le podrían imponer como condición el uso de un brazalete electrónico y el impedimento para que pueda viajar al extranjero.
Sin embargo, la Fiscalía General de la República (FGR) ha sostenido durante la audiencia, que al cierre de esta edición sumaba más de ocho horas, que se mantiene el riesgo de que Lozoya se evada de la justicia y, por lo tanto, debe continuar en prisión preventiva justificada.
Por medio del agente del Ministerio Público, Manuel Granados, señaló que el imputado siempre ha buscado dilatar el proceso y evadir su responsabilidad, a través de “argucias” o “chicanas”.
El exdirector de Pemex dijo que el caso de los presuntos sobornos de Odebrecht se convirtió en uno de “extrema injerencia política grave. Esta prisión preventiva con base en pruebas prohibidas de origen en otros países, y señaladas como improcedentes y obtenidas mediante tortura, violación y debido proceso”.
El juez sustituto de Enjuiciamiento, José Rivas González, dictó la resolución respecto a mantener la medida cautelar. El abogado de Lozoya afirma que apelará.