En lo que va de este 2024, se ha registrado el asesinato de 11 políticos, entre aspirantes a cargos de elección, funcionarios públicos y familiares de los mismos.
Sin embargo, en los últimos nueve meses, suman por lo menos 50 casos de violencia en el contexto electoral, de los cuales en 33 se llegó al crimen de políticos, entre los que 16 eran aspirantes a una candidatura.
Este último dato lo registró el Primer Informe de Laboratorio Electoral titulado Violencia Electoral proceso 2023-2024, que realizó su análisis prácticamente desde que empezó el proceso para renovar la Presidencia de la República, en junio del año pasado, con los procesos internos de los partidos.
El reporte apuntó que particularmente a partir de dicha etapa, en promedio han sido asesinadas más de tres personas cada mes. De las 33 víctimas mortales registradas, 28, que representan 84.8 por ciento, eran hombres, y cinco, equivalente al 15.2 por ciento, eran mujeres.
Los políticos abatidos pertenecen a todas las fuerzas políticas, tanto del frente opositor del PAN, PRI y PRD, como de Movimiento Ciudadano, el Partido Verde y hasta de personas cercanas al oficialismo, como se observa en los últimos asesinatos, que fueron de familiares del líder de la mayoría en el Senado, Ricardo Monreal, su cuñado, Juan Pérez Guardado, y su sobrino, Jorge Antonio Monreal Martínez.
Y de forma específica, entre los 16 aspirantes a cargos de elección que fueron asesinados: cinco pertenecían a Morena; cuatro al PAN; tres a MC; dos al PRD, y uno al PRI y al PVEM, respectivamente.
El 21 de diciembre se cerraron los casos de 2023 con el crimen en Acapulco de Ricardo Taja, aspirante a diputado federal por Morena.
En lo que va de este año se acumulan con 11 los crímenes, que iniciaron el 4 de enero con el del secretario general del PAN en Morelos, Giovanni Lezama Barrera, que aspiraba a una diputación federal y fue asesinado a balazos en Cuautla, Morelos. El protocolo de seguridad electoral anunciado por el Instituto Nacional Electoral (INE) se prevé para los aspirantes federales, con la posibilidad de revisar casos locales que se puedan canalizar con las autoridades estatales.
Sin embargo, no existe un protocolo para el caso de funcionarios, como en el caso de los familiares de Monreal o de Alfredo Chávez González, secretario del ayuntamiento de Villa de Álvarez, Colima quien fue asesinado el viernes pasado.
Además, de los registros se reporta el caso de una mujer, que fue la dirigente de Movimiento Ciudaano en Jacona, Michoacán, Miriam Nohemí Ríos.
